Este jueves, 20 de mayo, celebramos el Día Mundial de las Abejas, que fue instaurado en el año 2017 por la FAO para defender la existencia de las abejas, así como de los polinizadores, ante su progresiva desaparición, con el objeto de garantizar la fertilización de las plantas y de los cultivos (contribuyen a la fecundación del polen de 87 de los 115 principales cultivos del mundo), la conservación de la biodiversidad y la sostenibilidad de la alimentación humana global (al mejorar la producción), así como la propia supervivencia de la agricultura y la salud de los consumidores.
La producción de 87 de los 115 principales cultivos del mundo dependen de la contribución de las abejas y de otros polinizadores
Para este efecto, las abejas son un indicador biológico de la salud de nuestros campos y montes, un barómetro de nuestra naturaleza, porque donde ellas proliferan adecuadamente se está demostrando que hay un rica y variada diversidad floral, y producen miel y polen en abundancia, pero en las zonas donde decae la existencia de las colmenas algo está sucediendo en la naturaleza o en los cultivos que no garantiza su natural supervivencia. En nuestra comunidad autónoma se nos presentan ambas caras de la situación.
Las abejas son un indicador biológico de la salud de nuestros campos y montes, un barómetro de nuestra naturaleza. Si no hay salud para las abejas tampoco habrá salud y bienestar para la especie humana
En Galicia tenemos de la orden de un 30-40% de pérdidas todos los años de colonias abejas (algo absolutamente inaceptable en ninguna ganadería ni actividad agrícola o ambiental) por múltiples factores producidos o traídos por el ser humano: el cambio climático (heladas tardías, sequía, floraciones irregulares…), el uso de plaguicidas y herbicidas en todos los cultivos convencionales, la aplicación de biocidas al aire libre, la agricultura intensiva y los monocultivos forestales (eucalipto y pino) y agrícolas (maíz y pastos de ensilado), el cambio de uso de las tierras, los desbroces del monte inadecuados e intemporales, la plantación de árboles sin florescencia en los ciclos cortos, la destrucción de los hábitats naturales, el fuego, los ácaros de la Varroa destructor y el tártago negro de la avispa velutina, además de las dolencias propias de las abejas (nosemiosis y loque americana).
En Galicia tenemos de la orden de un 30-40% de pérdidas todos los años de colonias abejas, algo absolutamente inaceptable en ninguna ganadería ni actividad agrícola
Todo un panorama pésimo para reflexionar sobre él, pues si no hay salud para las abejas, tampoco habrá salud y bienestar para la especie humana. Un ambiente sano para las abejas también producirá efectos en el bienestar de las personas. Y todos los productos de las abejas son saludables, sea la miel, el polen, la cera, el propóleo o el veneno!
Sin embargo, no sólo las abejas melíferas están en peligro, sino que las abejas silvestres, los abejorros, las mariposas y todos los demás insectos polinizadores también están corriendo el riesgo de ver amenazados sus hábitats y su sustento alimenticio en polen y néctar.
Prohibición de tres insecticidas nocivos para los polinizadores
En este mes de mayo tenemos asimismo un motivo especial de celebración, pues el Tribunal Europeo de Justicia confirmó lo veto definitivo a tres insecticidas neonicotinoides (imidaclopride, clotianidina y tiametoxam) muy nocivos para las abejas y los insectos polinizadores, de las multinacionales agroquímicas Bayer y Syngenta. Este debe ser un paso de cara al cambio de estrategia por parte de las multinacionales y a la reducción del uso de los pesticidas actual al 50% en este decenio en el que andamos, y con otras tácticas temporales de aplicación durante las floraciones.
La legislación está yendo en un bueno sentido, pero debe continuar controlando con seriedad científica la homologación de otros nuevos productos fitosanitarios
La sentencia es un paso de cara a una mayor protección de las abejas y la defensa de un principio de precaución basado en hechos en Europa. Ahora hay que mejorar el respeto a la prohibición y atajar el actual abuso de las autorizaciones de emergencia por parte de algunos estados miembros, además de controlar con seriedad científica la homologación de otros nuevos productos fitosanitarios que no dejan de ser peligrosos para los insectos polinizadores. La legislación está yendo en un bueno sentido, mas la defensa de las abejas debe continuar.
El Estado español se mantiene en la retaguardia y parece no andar en la órbita de la defensa de la biodiversidad que preconizan las políticas de los estados más verdes de la Unión Europea
A propósito de la evaluación de los riesgos de los pesticidas (insectidicas, fungicidas y herbicidas) sobre las abejas, el Estado español (uno de los principales consumidores de productos fitosanitarios en Europa, con más de setenta millones de kilos de pesticidas usados en los cultivos al año y el 75% de los suelos agrícolas contaminados por ellos) va mucho de la mano del lobby de la agroquímica, se mantiene en la retaguardia y parece no andar en la órbita de la defensa de la biodiversidad que preconizan las políticas de los estados más verdes de la Unión Europea, que parten de la aceptación de unas pérdidas de las colonias de abejas en este caso en un umbral alrededor del 7%, en tanto que España propone duplicar este índice de los polinizadores del 15 al 23%. Para las personas abejeras y las ecologistas el índice de riesgos en este ámbito tendría que ser cero.
Concienciación social
Las decisiones políticas son otra alternativa a las acciones judiciales. Y el mundo de la política español y gallego deberían hacer caso porque la opinión pública está a cada paso más sensibilizada sobre el tema de los pesticidas y los alimentos sanos. En el uso abusivo del glifosato tienen la ocasión de empezar a cambiar de rumbo.
Por tanto, hay que hacer presión para que se reduzca el uso de plaguicidas en la agricultura, que no se utilicen los pesticidas nocivos para las abejas; de este modo la industria actuaría con más sensatez en su elaboración. Los apicultores somos conscientes de la importancia de la agricultura en el panorama español y gallego, mas los agricultores no deben olvidar la imprescindible y necesaria aportación en la polinización que realizan las abejas. La agricultura, que tiene un fundamento básico en la apicultura, tiene otras alternativas más saludables y sostenibles.
En el uso abusivo del glifosato las Administraciones tienen la ocasión de empezar a cambiar el rumbo haciendo caso a una opinión pública cada vez más sensibilizada con los alimentos sanos
A la Asociación Galega de Apicultura-AGA nos resulta inaceptable que los apicultores tengan que sufrir las consecuencias de la utilización de los pesticidas por los agricultores en ese porcentaje de pérdidas. Por realizar un trabajo de polinización gratuito para la agricultura y de valor incalculable para la sociedad, las abejas deben ser mejor consideradas y cuidadas por la gente del campo, así como por nuestras Administraciones y nuestros políticos. Hacen falta actuaciones políticas para su defensa. Un propósito de AGA para Galicia es el de evitar que nuestras abejas mueran de hambre en los desiertos sin néctar ni polen perennemente enverdecidos de parte de nuestro paisaje.
Los apicultores somos conscientes de la importancia de la agricultura en el panorama español y gallego, mas los agricultores no deben olvidar la imprescindible y necesaria aportación en la polinización que realizan las abejas
Sin ninguna duda, está habiendo un movimiento de concienciación para denunciar a las multinacionales agroquímicas que producen pesticidas, por ser nocivos para la salud humana, incluida la de los propios agricultores, que están muy expuestos y son otras víctimas de ellos. Y de los procesos aprobados o en curso contra los gigantes de la agroquímica está naciendo una jurisprudencia muy útil para crear una justicia sanitaria a escala mundial.
Cuidando la salud de las abejas cuidamos la salud de las personas. Pongamos todos los días unas gotas de miel y unos granos de polen gallego en nuestra dieta alimenticia!
AGA desarrollará online este jueves 20 de mayo actos de apoyo a la protección y supervivencia de las abejas a través de su página web.