Incertidumbre con los nuevos contratos de la leche, ante las fintas de bajadas para agosto

Las industrias están obligadas por ley a presentar una propuesta dos meses antes del vencimiento de los acuerdos con las granjas, lo que ha llevado a que estén presentando en el campo ofertas con bajadas de alrededor de 4-5 céntimos, pero las granjas esperan las ofertas reales para la segunda quincena de julio

Incertidumbre con los nuevos contratos de la leche, ante las fintas de bajadas para agosto

¿Cómo va a evolucionar el precio de la leche en la segunda mitad del año?. A día de hoy, no se sabe. Es un interrogante para las propias industrias lácteas, que están atentas a la evolución del mercado y del consumo, y para las granjas. En primavera, la mayoría de granjas e industrias firmaron acuerdos por 4 meses, a la espera de que en verano se clarificara el escenario. Pero la cosa continúa sin estar clara.

La producción de leche en Europa remontó desde inicios de 2023 y cerró el primer trimestre del año con un 0,7% de producción más que en el primer trimestre del 2022. En línea con esa mayor oferta, los precios de la leche en el campo bajaron en Europa, hasta una media de 47,5 céntimos en abril. Lo mismo sucedió con la mayoría de productos industriales (leche en polvo, mantequilla, quesos), que evolucionan a la baja desde comienzos de año.

Con la llegada de la primavera y los aumentos estacionales de producción, la disponibilidad de leche fue alta en toda Europa, lo que llevó a una mayor entrada de importaciones hacia España, tanto de leche líquida como de quesos. Pasada la primavera, queda por ver cómo afectan las sequías estivales a la producción de leche a nivel europeo. Si se reducen las entregas y el consumo se mantiene alto, el escenario podría ser positivo para las granjas, pero si por el contrario siguen aumentando las entregas y el tirón del consumo es insuficiente, pintan bastos.

En España la producción mensual de leche se mantiene desde hace tiempo por debajo de la misma producción del año anterior, una tendencia que se rompió ligeramente en abril por el aumento de la producción en Galicia (+1,7%). Los aumentos de entregas en Galicia, que coinciden además con los picos de producción en primavera, dejaron a algunas industrias con ciertos excedentes estacionales, que en algún caso incluso se tuvieron que derivar a leche en polvo.

Este escenario primaveral lleva a las industrias a afrontar los nuevos contratos con precaución. Obligadas por ley a presentar un contrato anual dos meses antes de la caducidad del anterior, la mayoría de empresas optaron por presentar acuerdos anuales con bajadas de alrededor de 4-5 céntimos, si bien en el sector se da por seguro que estos contratos son simbólicos, pues las ofertas reales se negociarán en la segunda quincena de julio, cuando la situación esté más clara.

“Como mínimo, lo que esperamos es que se mantengan los contratos actuales, en algún caso con ligeras subidas” -señala Óscar Pose, responsable de Ulega, la organización de productores de Unións Agrarias-. “Los contratos que están presentando las industrias tienen la única función de cumplir con las obligaciones legales, pero los contratos verdaderos se negociarán en las próximas semanas”, valora.

En la misma línea se expresan en Agromuralla, que critican las “ofertas ficticias fuera de mercado” que están trasladando las industrias.

De cara al nuevo acuerdo, se espera que las industrias quieran firmar compromisos anuales o, por lo menos, hasta marzo, para defenderse de posibles picos de precio de la leche en otoño – invierno.

Ofertas iniciales ya presentadas
Las ofertas iniciales que están presentando las industrias llegan en la mayoría de los casos con el aviso de que habrá una segunda propuesta posterior. Según estas primeras propuestas, el precio de la leche quedaría por debajo de los 50 céntimos a partir de agosto, perdiendo de este modo buena parte de la revalorización lograda en la segunda mitad del año pasado.

A las bajadas de entre 5 y 8 céntimos aplicadas por la mayoría de las industrias en el mes de abril, se sumaría ahora un nuevo descenso de entre 4 y 5 céntimos, según trasladan los borradores de los contratos anuales presentados por empresas como Lactalis, Entrepinares o Naturleite.

No era habitual hasta este año que tocara renovación de contratos en Galicia en los meses del verano pero las reticencias de las empresas a firmar por un año en el mes de abril las llevó a hacer contratos de corta duración que, en la mayoría de los casos, finalizan su vigencia a finales de julio.

Muchos de los contratos de corta duración firmados en abril finalizan su vigencia en julio

Empresas como Lactalis, Larsa, Entrepinares o Naturleite ya hicieron llegar estas primeras ofertas a los ganaderos, con bajadas generalizadas y propuestas de un año de duración a precio variable, poco habitual en Galicia, excepto en el caso de Larsa, que ya venía vinculando el 30% del precio pagado por la leche a los productos industriales.

Lactalis
Lactalis hizo una propuesta de contrato con un 75% de la leche a un precio fijo de 47 céntimos y un 25% ligado al precio de la leche en polvo entera (precio de la leche equivalente), lo que dejaría en estos momentos el precio de la leche en el entorno de los 45 – 46 céntimos.

En la actualidad, en función del tamaño de la granja, los contratos firmados en primavera pagan la leche en el arco de los 48,60 – 51,60 céntimos.

Entrepinares
Entrepinares mandó una oferta a las 170 ganaderías que suministran a su planta de Vilalba con un precio base de 49 céntimos indexado al índice A3 de la Inlac. Los contratos actuales, firmados en abril, no siguen esta fórmula variable, sino que son a precio fijo.

Esta oferta, que tiene carácter preliminar, con el objetivo de cumplir con el plazo normativo de remisión al ganadero con 2 meses de antelación a la firma, supondría una bajada de 4 céntimos con respecto a los contratos vigentes, con un precio base de 53 céntimos más calidades (0,5 céntimos el valor de la décima de grasa a partir de 3,80% y 0,8 el de la proteína a partir de 3,20%).

La oferta enviada a las explotaciones es por un año, aunque no se sabe cual va a ser la duración de los nuevos contratos que se acaben firmando finalmente. El actual contrato, que entró en vigor el 1 de abril, fue firmado por 4 meses, y finaliza su vigencia el 31 de julio.

Naturleite
En el caso de Naturleite, la oferta enviada a sus 210 ganaderías gallegas establece un precio base de 46 céntimos, que se incrementaría hasta los 47 céntimos con la máxima puntuación en la certificación de bienestar animal y con la doble AA en calidad higiénico-sanitaria.

El nuevo precio supone una bajada de 6 céntimos a respecto del percibido en este momento por las granjas proveedoras de la planta de Meira, que renovó contratos esta primavera también por 4 meses, con un precio de 55 céntimos en abril y 53 en mayo, junio y julio.

Alta producción en Europa
Las circunstancias en el mercado, a nivel de oferta, cambiaron por completo respecto de hace un año, cuando la escasez de leche que se dio el verano pasado hizo elevar los precios hasta máximos históricos debido a la pugna entre industrias por garantizar su cadena de suministro.

Pero este año la producción en los países del norte de Europa sigue alta, liderada por los incrementos en Alemania, Países Bajos, Dinamarca, Suecia, Polonia o República Checa; mientras en el sur Francia, España, Portugal o Italia están sufriendo descensos.

En el caso español, mientras Galicia mantiene los litros de leche que ordeña, el resto de comunidades, como Castilla y León, Andalucía o Cataluña están sufriendo los efectos de la sequía y una merma en la producción de leche.

En el lado de la demanda, la alta inflación y la subida de las hipotecas a causa del Euríbor están provocando una menor renta disponible de las familias, lo que puede estar afectando al consumo. En el supermercado el brick aguanta en precios elevados y el queso tuvo únicamente una pequeña corrección, a pesar de la entrada masiva de queso barato del norte de Europa, con consecuencias sobre las queserías gallegas.

En lo que va de año se reactivaron las importaciones tanto de queso industrial de países como Alemania, Holanda o Dinamarca, como de leche procedente de Francia y Portugal. En los últimos días trascendía precisamente la entrada de cisternas de leche de Portugal con destino a la planta de Inleit en Teixeiro, que perdió ganaderías suministradoras en la renovación de contratos llevada a cabo en abril.

Las empresas que se dedican a fabricar productos industriales, caso de Reny Picot, están siendo en este momento de las más perjudicadas por el descenso de las cotizaciones de la leche en polvo en los últimos meses y, en menor medida, de la mantequilla, que sigue manteniendo precios medios aceptables.

Roberto García. Unións Agrarias

“Los contratos indexados son la mejor fórmula para granjas e industrias”

El secretario general de Unións Agrarias, Roberto García, considera que el actual escenario de incertidumbre es perjudicial tanto para industrias como para las granjas: “Tenemos que hacer una reflexión y darnos cuenta de que lo que más nos conviene a todas las partes es la estabilidad, que se puede conseguir con contratos indexados a un índice de la Interprofesional Láctea (Inlac), por ejemplo el A3”, valora.

“Los contratos a pocos meses son mal negocio para la industria cuando los precios están altos, pues se enfrenta a situaciones de especulación y de batalla por el abastecimiento. Tampoco son positivos para las granjas cuando la tendencia es la contraria, de precios a la baja. Por tanto, tenemos que volver a la idea de lograr precios estables, con contratos que evolucionen en función de las circunstancias del mercado”, subraya.

Al respecto de los contratos que indexan parte de la leche a los productos lácteos industriales, como los que emplea Larsa habitualmente o el propuesto por Lactalis, García los rechaza de plano.

“Larsa -propiedad de la asturiana Capsa (Clas)- está indexando la leche a los productos lácteos industriales en Galicia, perjudicando a las granjas, pero no hace eso mismo en Asturias, donde la leche se pagó en abril por encima de los 60 céntimos, 7 céntimos maís que la media gallega. La Xunta debería tomar cartas en el asunto para que una empresa que presume de cooperativa no se aproveche así de las granjas gallegas”, cuestiona el secretario xeral de Unións, que aboga por los índices de la Inteprofesional Láctea, pactados entre todas las partes.

Agromuralla denuncia una vulneración encubierta del Paquete Lácteo con “ofertas fictícias fuera de mercado”

La asociación de ganaderos Agromuralla denuncia una vez más la actitud de las industrias en el proceso de negociación de los contratos con los productores. “Aunque la legislación protege teóricamente la capacidad negociadora de las explotaciones, en la práctica esto no se está produciendo. En abril nos llegaron con los contratos el último día y ahora nos mandan unas ofertas totalmente ficticias. Las industrias se cubren las espaldas enviando a las ganaderías una propuesta poco realista que no permite abrir una negociación efectiva de precios, duración y condiciones del contrato. Son ofertas que están totalmente fuera de mercado y que no permiten una negociación real al ganadero”, indican.

Para Agromuralla estas ofertas tienen además consecuencias muy negativas en el sector, por “meter miedo al ganadero en relación a una posible bajada de precio”. Consideran, sin embargo, que “cada vez hay menos motivos para un descenso del valor de la leche porque España siempre fue deficitaria en producción y de este modo cada vez lo será más”.

Finalmente, reclaman “un mayor control a las importaciones y un etiquetado claro”. “Antes venía leche de Francia, ahora allí no lo hay pero viene de Portugal, y siguen inundándonos con queso barato de Alemania”, describen.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Solicitamos su permiso para obtener datos estadísticos de su navegación en esta web, en cumplimiento del Real Decreto-ley 13/2012. Si continúa navegando consideramos que acepta el uso de cookies. OK | Más información