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El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Rías Baixas prevé que la vendimia de este año alcance los 46 millones de kilos de uva, una cifra récord, bastante superior a los 40 millones cosechados en 2022.
En concreto, los resultados del Informe de Estimación de la Cosecha hablan de un rendimiento medio de 10.507 kg. por hectárea. Esto, unido al Informe Favorable emitido por el Órgano de Control, han motivado que el Pleno del Consejo Regulador haya adoptado este martes el acuerdo de subir un 12,5% el rendimiento por hectárea en esta vendimia para todas las variedades amparadas por el reglamento, manteniendo los niveles de control y calidad de esta Denominación de Origen. De este modo, con los datos del informe presentados hoy, la estimación de producción para la cosecha 2023 superaría los 46 millones de kilos de uva en la Denominación de Origen Rías Baixas, si bien es cierto que el ciclo vitícola no está finalizado y la meteorología podría condicionar este resultado.
La documentación presentada ayer al Pleno constata una buena tasa de brotación, una elevada fertilidad, un buen cuajado y un tamaño de racimo algo superior al de una cosecha normal y en buen estado sanitario. En cuanto a la fecha de inicio de la vendimia, dicho informe prevé que se produzca a principios del mes de septiembre, dependiendo de la evolución del viñedo durante el mes de agosto y de los controles de maduración.
Aumento en 114 hectáreas en la superficie vitícola respecto a 2022
Para la elaboración de este documento, tal y como se encuentra procedimentado en el Manual de Calidad, el Departamento Técnico del Consejo Regulador requiere la colaboración de los técnicos más implicados en el asesoramiento vitícola de la Denominación de Origen, apoyándose, en este caso, en la información facilitada por 30 técnicos de campo repartidos por la Denominación de Origen, que supervisan más del 50% de la superficie productiva (2.236 hectáreas de las 4.449 hectáreas que hay inscritas en este momento en el Consejo Regulador de Denominación de Origen Rías Baixas) y que se complementa con la información recabada en las inspecciones de auditoría, tanto en observación directa como en percepción de los viticultores. Toda esta información se trata estadísticamente para obtener un rendimiento medio ponderado por subzona, que posteriormente se extrapola a la totalidad de la superficie amparada por la Denominación de Origen.
A fecha 1 de agosto de 2023, este Consejo Regulador cuenta con 176 bodegas inscritas. La superficie de esta Denominación de Origen crece en 114 hectáreas respecto del informe del año pasado, una superficie que se reparte entre 22.808 parcelas atendidas por 5.033 viticultores.
