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Después de la tormenta de los primeros cuatro meses de este año ha llegado la calma al sector de la alimentación animal. No se esperan vaivenes significativos hasta final de año e incluso se detectan indicios de relajación en los precios de las materias primas que podrían confirmarse de cara al año que viene, aunque esa tendencia no garantizaría una bajada en el precio final que pagan los ganaderos por el pienso, debido a que el incremento de costes energéticos o de transporte está impactando también en las plantas de fabricación.
El ministro de Agricultura, Luis Planas, se ha reunido esta semana con representantes del sector de la alimentación animal para conocer la situación actual. En el encuentro se han analizado las previsiones de cosecha y existencias de determinadas materias primas, como maíz o soja, que marcan la cotización del resto de cereales y oleaginosas.
Tras la inestabilidad y riesgo de desabastecimiento de los cuatro primeros meses de 2022, en la actualidad hay materia prima abundante aunque a precios todavía elevados
La flexibilización de las importaciones adoptadas por la Comisión Europea tras la guerra de Ucrania, así como las excepciones en las normas de condicionalidad de la PAC, sirvieron para relajar la presión vivida en los meses de febrero y marzo.
La disponibilidad de materia prima necesaria para la elaboración de piensos está garantizada en estos momentos gracias sobre todo a la normalización en las importaciones de países como Brasil o EEUU y a la lenta salida de cereal de los puertos ucranianos tras el acuerdo de Rusia con Turquía, ya que la cosecha tanto en España como en otros países europeos ha sido sensiblemente menor en esta campaña debido a la sequía vivida en primavera.
Disponibilidad suficiente e indicios de posibles bajadas de precios
Jorge de Saja, director general de CESFAC, la Confederación Española de Fabricantes de Alimentos Compuestos para Animales, que estuvo presente en la reunión de este miércoles en el Ministerio, resume la situación existente en estos momentos: “disponibilidad suficiente, precios de las materias primas estables y con algún indicio de que puedan bajar y costes de producción (y por tanto precio final del pienso) todavía demasiado altos por el impacto de los costes energéticos”.
Prevemos que los precios de las materias primas puedan bajar en los próximos meses (Jorge de Saja, CESFAC)
“Nosotros consideramos que a pesar de los problemas de suministro en la zona vinculada al puerto de Tarragona, y aunque las cosechas se han reducido en Europa, hay suficiente disponibilidad de materias primas para atender la demanda. Otra cosa es el precio, aunque confiamos en que no haya ya más subidas de precios e incluso pueda haber bajadas”, pronostica.
La situación de suministro es mucho mejor a día de hoy que en los primeros cuatro meses del año
El director general de CESFAC considera que “está perjudicando más en este momento a los fabricantes la subida de los costes energéticos que el de las materias primas. Si las materias primas repiten las cotizaciones de ahora mismo o incluso hay alguna bajada eso podría permitir a las plantas de fabricación volver a la rentabilidad perdida en los últimos meses. Pero si el precio de la energía sigue subiendo, tanto las fábricas de pienso como las ganaderías entrarán de nuevo en números rojos”, asegura.
Peticiones al ministro
Reunión este miércoles de los representantes de las industrias de alimentación animal con el ministro Luis Planas
Las peticiones más significativas trasladadas en la reunión de este miércoles al ministro por las empresas de alimentación animal se centran en distintos ámbitos. Por un lado, consideran necesario prorrogar de cara al próximo año las medidas adoptadas a consecuencia de la guerra de Ucrania, como la flexibilización de la normativa de pesticidas para la importación de materias primas del continente sur.
A la hora de la verdad han venido muy pocos barcos de Argentina porque se ha cubierto la demanda con importantes cantidades de maíz procedente de EEUU
“En septiembre hay que tomar la decisión y nosotros hemos pedido que se inste a la Comisión Europea a renovar las medidas excepcionales adoptadas en su momento como garantía ante la alta volatilidad del escenario actual, porque la llegada de materia prima procedente de otros orígenes puede cambiar”, indica Jorge.
Aunque reconoce que “en estos meses a la hora de la verdad han venido muy pocos barcos de Argentina porque se ha cubierto la demanda con importantes cantidades de maíz procedente de EEUU”.
A mayores, uno de los elementos que está impactando en estos momentos en la fabricación de piensos en España son los “graves problemas” que está habiendo en el puerto de Tarragona como consecuencia de la “huelga encubierta de estibadores”.
“Se trata de la mayor dársena para entrada de graneles para alimentación animal en España, sobre todo para la zona de Cataluña y Aragón, donde se produce gran parte de la fabricación de piensos española. El puerto ha estado muy poco operativo durante todo el verano y hemos pedido soluciones a este conflicto laboral que está provocando importantes problemas”, aseguran.
Hemos pedido un plan de contingencia que evite las enormes distorsiones de primavera en el funcionamiento de las plantas de fabricación y el suministro a las granjas en caso de una nueva huelga de transporte en otoño
Desde CESFAC temen además los efectos de una posible huelga de transportes en el mes de octubre o noviembre, con consecuencias como las sufridas en primavera, cuando “llegó a peligrar el suministro a muchas granjas”, afirman.
En materia de energía, las plantas de fabricación de piensos no son consideradas industrias electrointensivas y, por lo tanto, no tienen acceso a algunos paquetes de medidas que desde el Gobierno se han ido implementando para hacer frente a la escalada del precio de la luz. “Somos un sector esencial, junto con la ganadería, y por este carácter esencial pedimos poder equipararnos, a los efectos de acceso a las ayudas del Ministerio de Industria y Energía, a otros sectores más electrointensivos pero no tan esenciales como nosotros”, argumenta CESFAC.
Caída de consumo de pienso en el sector de vacuno de leche y de carne
La producción industrial de piensos compuestos para alimentación animal había mantenido un crecimiento constante en España desde el año 2008 que se rompió en 2020. Desde los 21,3 millones de toneladas fabricadas en 2008 se había llegado a 25,2 millones en 2019.
Pero desde entonces, se ha frenado ese crecimiento, primero como consecuencia de la pandemia y, posteriormente, a partir de 2021, como consecuencia de la escalada de precios de las materias primas.
Está habiendo una producción por encima de lo esperado en avicultura y un descenso en vacuno de leche
La previsión para este año 2022 que realiza CESFAC es de 24,6 millones de toneladas de pienso fabricadas en España, de las que 10,9 millones serían para porcino; 4,2 para avicultura y 9,4 para vacuno, conejos y pequeños rumiantes.
“Las cifras hasta agosto confirman las previsiones prudentes que habíamos hecho. Con algunas variaciones en vacuno de leche a la baja y en avicultura al alza, esperamos una repetición en kilos de las cifras de producción del año pasado”, detalla Jorge de Saja.
Se está produciendo el sacrificio anticipado de algunos animales en vacuno de leche por la subida de los costes de producción
Las estimaciones que cada año realizan los fabricantes de pienso están basadas en datos reales de número de animales vivos de cada especie y en consumos históricos. “Se está produciendo el sacrificio anticipado de algunos animales en vacuno de leche por la subida de los costes energéticos y de insumos para alimentación”, asegura.
El elevado precio que en estos momentos tienen las vacas de desvieje está incentivando esta práctica por parte de las ganaderías de leche. Debido al elevado coste del pienso, que ha alcanzado niveles históricos este año, muchas explotaciones adelantan la salida de animales hacia el matadero.
El pienso para vacas de leche había empezado el año en 316€/tonelada y se sitúa en estos momentos en 409
En estos momentos el precio de la tonelada de pienso para vacas de leche se encuentra ya en 409€, según los datos publicados por el Ministerio de Agricultura en el mes de julio, superando con creces los precios de 2012, durante la anterior ola de carestía de las materias primas, cuando la tonelada de pienso había llegado a alcanzar los 326€.
Algo similar ocurre con el pienso para cebo de terneros, que arrancó el año en 338€ la tonelada y se sitúa en estos momentos en 428€, lo que hace que en Galicia, junto a este descenso de consumo de pienso vinculado al sector lácteo, en vacuno de carne se esté notando también una bajada de consumo, ya que numerosas ganaderías de vacas nodrizas han optado este año por no finalizar los terneros con el habitual cebo de dos meses encuadrados y enviarlos directamente a matadero desde el prado.
