La organización agraria Unión de Uniones de Agricultores y Ganaderos, en el marco de una reunión mantenida recientemente con la Subdirección General de Calidad y Seguridad Industrial del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, ha insistido en la necesidad de adaptar la normativa relativa a la maquinaria agrícola a la realidad del sector para evitar una excesiva burocracia que ralentiza los trabajos.
Unión de Uniones ha señalado los problemas derivados de la instrucción 20/V-139 de febrero de 2020 que, al considerar los aperos remolcados como maquinaria agrícola remolcada, obliga a homologarlos, matricularlos, inscribirlos en el ROMA, estar sujetos a ITV y disponer del seguro obligatorio para circular por la vía pública.
“Esto ha provocado que este tipo de maquinaria, hasta ahora utilizada de manera habitual por el agricultor, pueda ser objeto de sanción”, advirten. Para evitar esta situación, la organización ha solicitado al Ministerio una moratoria de tres años y un proceso de homologación en bloque que permita circular al agricultor sin problemas como hasta ahora.
Asimismo, otro de los temas tratados ha sido la instalación de los sistemas localizados de aplicación de purines en las cisternas. En este sentido, la organización agraria advierte de que “se han dado casos donde empresas de estaciones ITV han indicado al agricultor que debe iniciar un proceso de reforma de la cisterna para instalar estos sistemas cuando, según su condición de elemento intercambiable, no debería iniciarse este proceso”.
Piden eximir a los tractores agrícolas de inspecciones técnicas
Por otro lado, los representantes de la organización han defendido la necesidad de eximir a los tractores agrícolas de las inspecciones técnicas, como ocurre en otros países del entorno como Francia, Italia o Portugal, de acuerdo con la Directiva 2014/45/UE o una ITV específica de la maquinaria agrícola fuera del alcance de esta Directiva con el fin de adecuarlo más a la realidad agraria.
La organización insiste en que se haga una revisión del manual de inspección para que sea más específica a la maquinaria agrícola, manteniendo las debidas exigencias en materia de seguridad.
Asimismo, han reclamado que las cabinas de los tractores sean consideradas elementos de confort, de cara a facilitar la homologación de tractores con protección antivuelco y cabina instalada a posteriori y evitar así los problemas que tienen estas máquinas para pasar la ITV.
En cuanto a la respuesta por parte del Gobierno, según la organización agraria los
representantes del Ministerio de Industria se han mostrado comprensivos con las cuestiones planteadas por Unión de Uniones y se han comprometido particularmente a analizar, junto con la DGT, la cuestión de la homologación de los aperos.
“Asimismo, se han mostrado sorprendidos con la cuestión de los sistemas localizados de purines y la reforma de las cisternas, asegurando que no deben implicar una reforma al tratarse de elementos intercambiables por lo que, para evitar malas interpretaciones de la reglamentación, se han comprometido a trasladar esta cuestión a las Comunidades Autónomas para evitar que ocurran casos similares en un futuro”, concluyen desde Unión de Uniones.