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Quince macroexplotaciones de 20.000 vacas podrían producir tanto como las más de 8.000 granjas que quedan en Galicia. Sobre esa base, el Sindicato Labrego Galego considera una muy mala noticia el proyecto de la macrogranja de 20.000 cabezas que se anunció en Noviercas (Soria). La organización agraria ofreció hoy una rueda de prensa en Lugo para presentar una campaña contra esa iniciativa.
“Aunque la macroexplotación estará a más de 500 kilómetros de Galicia, de ir para adelante pondrá en jaque al sector lácteo gallego” -valora el Sindicato Labrego.- “Autorizar la implantación de este modelo de macro-granjas favorecería su construcción cerca de los grandes núcleos de población del Estado (área mediterráneo y centro peninsular), de cara a suministrarlos de leche, eliminando los gastos de recogida y minimizando los de transporte. Esto aceleraría un proceso de deslocalización de la producción láctea que ya está en marcha”.
La organización agraria recuerda que en la actualidad el sector lácteo gallego suministra cerca del 40% de la producción lechera del Estado, con un alto coste de transporte para las industrias. Las críticas del Sindicato Labrego a la macrogranja se centran en los siguientes puntos:
– Empleo: una sola granja con 20.000 vacas podría producir cerca de 180.000 toneladas de leche al año. Con 15 granjas industriales como esa se cubriría una producción como la gallega.
– Medioambiente: La explotación de Soria consumiría más de 4 millones de litros de agua al día y generaría unas 368.000 toneladas de purines al año, lo que implicaría una seria amenaza para el medio y los acuíferos. La empresa promotora, además, pide 6 millones de euros públicos para enfrentar el tratamiento de los residuos.
– Bienestar animal: excesiva intensificación de la producción.
– Riesgos sanitarios: un solo caso positivo de tuberculosis bovina obligaría al sacrificio de toda la cabaña. Esa medida implicaría un gasto en indemnizaciones públicas de 14,6 millones de euros, según las estimaciones del Sindicato Labrego.
– Calidad: España se convertiría en un productor de “leche-basura”, orientado en buena medida al mercado de leche en polvo, pagado a bajos precios en las granjas.
Acciones
En base a estos argumentos, el Sindicato Labrego, conjuntamente con la COAG, está desarrollando una campaña a nivel europeo. Pide la implicación de todos los partidos políticos y organizaciones del campo para lograr la paralización del proyecto.
Se está desarrollando además una recogida de firmas físicas y a través de internet contra el proyecto. Esta semana también se le entregó un dossier sobre el tema al comisario de Agricultura de la UE, Phil Hogan, que estuvo de visita en España.
