¿Qué cifras de producción y volumen de negocio maneja el sector cárnico gallego? ¿Son competitivas las industrias cárnicas gallegas?¿Cuáles son los subsectores más competitivos y con mayor presencia? Estas son algunas de las preguntas planteadas durante la VII Reunión Casal de Armán – Foro Económico de Galicia, que congregó a empresarios, investigadores y profesionales del sector. Durante el evento, coordinado por la Fundación Juana de Vega, el director de la entidad, José Manuel Andrade Calvo, expuso las conclusiones de la Estrategia del sector cárnico de Galicia 2022 -2030, elaborada por la entidad por encargo de la Consellería de Medio Rural.
Las cifras presentadas por la entidad muestran cómo los principales motores del sector cárnico gallego son el vacuno y el porcino, aunque las ganaderías de aves y las cunícolas también tiene gran importancia.
En Galicia se contabilizan un total de 19.537 ganaderías de vacuno de carne con 430.000 animales. En concreto, las ganaderías de vacuno tienen de media unos 22 animales y gestionan algo más de 11 hectáreas. Se sacrifican unos 381.000 canales de vacuno, con un peso medio de 250 kilos canal, lo que deja unas 95.000 toneladas de carne en 2020, según los datos hechos públicos por la Consellería de Medio Rural.
Casi la mitad de las ganaderías de vacuno que hay en Galicia están adheridas al sello Ternera Gallega
La Indicación Geográfica Protegida Ternera Gallega acapara el 55% del volumen de la carne que se comercializa en España bajo este sello de calidad. “Casi la mitad de las ganaderías de vacuno que hay en Galicia están adheridas a la IGP”, explica José Manuel Andrade Calvo, director de la Fundación Juana de Vega. Así, bajo este sello se encuentran unas 7.266 ganaderías y 389 cebaderos activos.
La comarca de Deza y el sur de la provincia de Ourense son las principales zonas de producción porcina en Galicia. En la comunidad se contabilizan un total de 2.591 granjas porcinas que tienen 1.500.000 plazas. De media, cada granja de porcino cuenta con unas 591 plazas. Se han sacrificado 1 millón de ejemplares, lo que deja una producción de unas 91.600 toneladas de carne. No obstante, desde el año 2009, la producción de carne de porcino ha experimentado una caída significativa.
La producción de carne de cerdo y de ave se concentra en la comarca de Deza, Terra Chá y el sur de la provincia de Ourense
Junto con la ganadería de porcino, buena parte de las 1.075 ganaderías de aves que se contabilizan en Galicia también están situadas en la comarca de Deza, Terra Chá y el sur de la provincia de Ourense. Se cuenta con casi 25 millones de plazas instaladas y cada ganadería dispone de media de unas 23.000 plazas. Estas granjas gestionan unas 4.744 hectáreas, según los datos extrapolados de la PAC.
Galicia es la tercera región productora de carne de conejo de España, con un total de 179 explotaciones distribuidas en el territorio gallego, que acumulan 619.000 plazas y que gestionan unas 300 hectáreas. De media, cada ganadería cunícola cuenta con unas 3.461 plazas. Desde 2017 se ha registrado un descenso de la producción que obedece a la caída general que se está produciendo en este sector. “Entre 2001 y 2019 se ha reducido la producción de carne de conejo en un 34% a nivel mundial, una tendencia que se está viendo también a nivel nacional”, detalla Andrade Calvo.
Galicia es la tercera región productora de carne de conejo en España, con casi 180 ganaderías repartidas por el territorio
En términos de volumen de producción de carne, tanto el caprino y ovino como el sector equino manejan cifras mínimas de volumen de negocio en comparación con los otros subsectores. Si bien, en cuanto al número de ganaderías, las primeras representan casi cuatro veces más. En total, se contabilizan de 15.783 ganaderías de caprino y ovino, que congregan unos 165.000 animales. De media, cada una cuenta con 10 animales y gestiona unas 3,44 hectáreas.
En cuanto al sector equino, en Galicia se contabilizan un total de 4.314 ganaderías, con casi 18.000 animales, situadas buena parte de ellas en el norte de la provincia de Lugo. Es un sector, en que ha caído notablemente también la producción de carne.
Preocupación por la falta de relevo
Algunos de los factores que limitan el crecimiento del sector de la carne a nivel mundial son las limitaciones de tipo ambiental. También hay cierta preocupación por las dificultades que podrán suponer las nuevas normativas relacionadas con el medio ambiente y con respecto al bienestar animal.
Sin duda, otro de los desafíos reside en atajar la creciente caída del consumo de carne en algunas sociedades, debido a los nuevos hábitos de alimentación.
“Se evidencia un grave problema de sucesión y continuidad de la actividad, dada la elevada edad de buena parte de los productores en activo”: José Manuel Andrade, Fundación Juana de Vega
En Galicia, uno de los principales retos que se presentan al sector es la elevada edad media de los titulares de las ganaderías de carne y la falta de relevo que afecta a todos los subsectores centrados en la producción de carne. “Se evidencia un grave problema de sucesión y continuidad de la actividad, dada la elevada edad de buena parte de los productores en activo”, señala José Manuel Andrade.
En el vacuno de carne, la media de edad de los productores es de 57 años, aunque en el 49% de estas granjas los titulares tienen ya 62 años de edad, según los datos presentados desde la Fundación Juana de Vega.
Entre los titulares de granjas de porcino, la media de edad se reduce a los 52 años, mientras que los más jóvenes son los productores de granjas de aves, con una media de 49 años. En una situación semejante se encuentra el sector cunícola, donde los productores tienen de media 51 años. Los ganaderos de equino se sitúan en los 54 años de media.
Los productores de ovino y caprino son los más mayores, con una media de edad que se sitúa en los 60 años
Mientras, sin duda el sector donde la media de edad es más elevada y la continuidad está más en juego es el ovino y caprino, ya que buena parte de los productores están ya en los 60 años.
Otro de los retos de la producción de carne es la volatilidad de los precios de las materias primas para alimentar el ganado, lo que lastra la competitividad de las ganaderías. En este sentido entra en juego el acceso a tierras, que permita incrementar la producción propia de forrajes en las ganaderías. “La nueva Ley de recuperación de la tierra agraria abandonada aprobada en Galicia abre una nueva oportunidad a acceder a tierras para estas ganaderías”, recuerda Andrade.
Manejo del territorio
Otro de los aspectos fundamentales de las ganaderías de carne gallegas es que buena parte de ellas conservan un manejo en extensivo, de manera que al margen del beneficio económico que supone esta actividad, contribuyen de manera activa a la gestión del territorio y actúan en muchos casos como auténticos mecanismos de protección y reducción del riesgo de incendios forestales al reducir la biomasa de los bosques. Los productores de carne gestionan más de 300.000 hectáreas de superficie en Galicia, casi la mitad de la superficie agraria útil.
Así, por ejemplo, buena parte de las ganaderías de bovino se sitúan en zonas de montaña de Lugo y Orense, donde son escasas las alternativas para la gestión de este territorio que no estén vinculadas a esta actividad. Estas ganaderías gestionan una superficie agraria útil de unas 214.000 hectáreas.
Las ganaderías de vacuno de carne gestionan una superficie agraria útil de unas 214.000 hectáreas
También es significativo la labor que realizan las ganaderías de ovino y caprino, que manejan unas 54.000 hectáreas o las ganaderías de equino, que gestionan una superficie de 36.195 hectáreas.
Tejido industrial de la carne en Galicia
El sector cárnico en España es el principal subsector dentro de la industria alimentaria. Tiene una cifra de negocio de 31.700 millones de euros y proporciona un valor añadido de 5.500 millones de euros. Este sector emplea en España a más de 110.000 personas. El destino de la producción nacional está centrada en el mercado interno, ya que casi el 80% se consume en España. Mientras, alrededor de un 13% se exporta a la Unión Europea.
En Galicia, la industria cárnica está integrada por 192 industrias, que dan empleo a 5.800 personas, que facturaron en 2019 un total de 1.350 millones de euros, que aportaron un valor añadido a la economía gallega de 296 millones de euros. La industria cárnica representa el 4% del empleo de la industria manufacturera gallega. La producción cárnica representa el 34% de la producción agraria y está formada 43.000 explotaciones cárnicas de todos los subsectores.
La producción cárnica representa el 34% de la producción agraria y está formada 43.000 explotaciones cárnicas de todos los subsectores
Comparando la industria cárnica gallega con la española y la europea se detecta un déficit en productos elaborados. Galicia tiene un mayor peso en la carne de bovino y ave fresca y refrigerada. Solo en la carne de bovino, el 25% se comercializa en fresco, mientras que esta cifra en el conjunto de España se reduce a un 9% y si se mira en Europa se eleva hasta un 13%.
En cuanto a la carne de ave, en Galicia el 30% se comercializa en fresco, sin transformación industrial, mientras que esta cifra en España es del 11% y el 12% en la UE.
El sector porcino gallego destaca por su mayor nivel de transformación industrial con respecto a la industria española
Ocurre lo contrario con la producción de porcino, donde Galicia destaca por el mayor nivel de transformación industrial con respecto a la industria cárnica española o europea.
El tamaño de las empresas importa
La Fundación Juana de Vega ha realizado también un análisis económico-financiero en el que analiza más de 2.000 industrias del sector cárnico en España entre los años 2015 y 2020. El estudio permite ver la rentabilidad del sector y la principal conclusión es que las empresas cárnicas gallegas tienen un bajo nivel de desempeño en cuanto a la rentabilidad económica con respecto de las españolas.
Las industrias cárnicas más rentables en Galicia son las empresas de mediano tamaño, seguidas de las pequeñas
“Las industrias cárnicas españolas se sitúan con un margen de resultados de explotación superior a las gallegas. Resulta relevante cómo la gallega tiene unos mayores niveles de rotación, pero al trabajar con menor margen no es capaz de compensar esa rentabilidad. El efecto del volumen con margen bajo no le permite obtener la rentabilidad económica de la industria cárnica española, y eso se explica en cierta medida por el déficit de productos transformados que hay en la gallega”, valora Andrade.
Hay una clara correlación entre mayor tamaño y rentabilidad de las industrias españolas, mientras que en el caso gallego el comportamiento es completamente diferente. Así, las industrias cárnicas más rentables en Galicia son las empresas de mediano tamaño, seguidas de las pequeñas empresas. Mientras, las grandes empresas y las microempresas se sitúan en igualdad de rentabilidad.
Las cifras de la producción de carne en España y Europa
España, con una producción de 7,5 millones de toneladas en el año 2020, es uno de los principales productores de carne de Europa, por delante se sitúa solo Alemania, que tiene una producción de 7,9 millones de toneladas.
La producción de carne en Europa ha tenido un crecimiento constante desde 2014, aunque se ha registrado una caída de las cifras en 2020, coincidiendo con la salida de la UE de Reino Unido con motivo del Brexit, ya que en tierras inglesas se producen unos 4 millones de toneladas.
Galicia es la tercera en cuanto a vacuno, aves y producción cunícola y apenas representa casi un 2% de la producción porcina española
En España el porcino es el principal subsector de producción en millones de toneladas, seguido de las aves. En tercer lugar se sitúa la producción de carne de bovino y de manera residual se sitúan tanto el ovino como caprino.
Cataluña es el principal productor de carne en España, con 2,5 millones de toneladas (33%), seguida de Aragón, Castilla y León y Andalucía. Galicia ocupa el octavo lugar, con un 5,45% de la producción cárnica nacional.
“Galicia siendo la octava región a nivel nacional, es la tercera en cuanto a vacuno, aves y producción cunícola, mientras que apenas representa un 1,83% de la producción porcina española”, explica Andrade.