¿Como lograr que el silo de maíz produzca más litros de leche?

Nos aproximamos al inicio del ensilado del maíz forrajero, y dependiendo de como se haga lograremos una mayor o menor digestibilidad de este forraje. Ángel Ávila, experto consultor para ganaderías de vacuno de leche, ofreció unas recomendaciones en la jornada Dekalb+Silo celebrada este año en Santiago de Compostela. Son estas...

¿Como lograr que el silo de maíz produzca más litros de leche?

Ensilado do millo no centro de mestura húmida da cooperativa AIRA en Sarria

En breve comenzará en Galicia la campaña de ensilado del maíz, el principal forraje de las ganaderías de vacuno de leche, y dependiendo de como lo hagamos (altura de corte de las plantas, picado de los granos de maíz y del resto de la planta), así como de cuando empecemos el silo, tendremos mayor o menor digestibilidad del mismo, o lo que es lo mismo, las vacas producirán más o menos leche, algo crucial para la rentabilidad de una granja.

Para conocer cuales son las claves para medir y mejorar la digestibilidad del silo de maíz, la jornada Dekalb+Silo, contó con la ponencia de Ángel Ávila, experto consultor para ganaderías de vacuno de leche.

Como regla general, subrayó que “los silos con menos materia seca y menos almidón tienen mucha más digestibilidad y más producción de leche, y por lo tanto debemos buscar silos muy digestibles tanto en almidón como en fibra”.

Como ejemplo, puso dos silos de maíz: Uno en el que el maíz se ensiló más seco, con un 42% de materia seca y un 39% de almidón, y otro en el que el maíz se cortó más verde, con un 30% de almidón y un 30% de materia seca. Las analíticas concluyeron que en el primero la digestibilidad de la fibra neutro detergente materia orgánica (aFNDmo) a las 30 horas de ser ingerido por la vaca era del 56,62% y en el caso del almidón a las 7 horas del 77,76%, mientras que en el segundo la digestibilidad se incrementó hasta el 72,95% y 85,41%, respectivamente. “Esto es muy importante en términos económicos porque toda la fibra y almidón del silo de maíz que la vaca no digiere va a la fosa de purín”, advirtió Ángel Ávila.

ANGEL AVILA 1

En este sentido, recomendó 5 vías posibles para mejorar y medir la digestibilidad del almidón del silo de maíz por parte del ganadero o técnico:

1)Prueba de flotación en cosecha fresca (grado de picado):

Consiste en evaluar la calidad del picado del maíz cuando se está realizando de una forma rápida y sencilla.

-1. Para ello necesitamos un recipiente – un cubo o una jarra- con un litro de agua aproximadamente. Verteremos en el agua un litro aproximado de ensilado fresco de maíz.

-2. Agite el contenido y espere aproximadamente dos minutos.

-3. Los granos precipitan hacia el fondo del balde..

-4. En la superficie del balde quedarán todos los elementos fibrosos (hojas y tallos).

-5. Remueva todos los componentes que se encuentran flotando y verifique el precipitado (encontrará todos los granos en el fondo).

-6. Si en el contenido hay entre 0 y 2 granos enteros el picado es ideal.

-7. Si hay entre 2 y 4 sería un picado adecuado.

–8- Si hay más de 4 granos de maíz enteros el picado no es el adecuado y habría que regular la picadora.

-9. Mientras más corto se pica el maíz, mayor cantidad de granos serán quebrados y molidos, y por tanto mayor será la digestibilidad del silo.

Este análisis debemos repetirlo varias veces el día del picado.

ANGEL AVILA 2 rotura gran de millo

2)Score de procesamiento del grano de maíz (Kernel Processing Score o KPS):

Otro sistema de medir in situ la calidad del picado del maíz es mediante el sistema KPS, por sus siglas en inglés. Consiste en medir el almidón del silo de maíz ensilado que pasa a través de un tamiz de 4,75 milímetros.

-Si pasa más del 70% la calidad del picado es óptima.

-Si pasa entre el 50 y el 70% sería un procesado adecuado.

-Si pasa menos de un 50% sería un picado inadecuado, con muchos granos sin romper o de forma gruesa.

A este respecto, Ángel Ávila expuso que según en estudio realizado en 5292 ganaderías de Estados Unidos, solamente un 31% registraron un procesado óptimo del maíz, en un 57% era adecuado y en un 12% deficiente.

“La calidad del picado es determinante, pues cuanto peor sea el índice KPS de procesamiento del grano, mayor es el porcentaje de almidón fecal, que la vaca excreta sin digerir y que acaba en la fosa de purín”, subrayó.

ANGEL AVILA 4 picado millo

3) Altura de corte de la planta:

La altura de corte es otro parámetro que influye de forma decisiva en la digestibilidad del silo de maíz y que podemos controlar durante el picado. “La parte inferior del maíz es lignina poco digestible, tierra y hongos que nos causarán problemas en el silo. La altura de corte debería ser de un mínimo de 39 centímetros”, defendió Ángel Ávila.

El experto puso como ejemplo un estudio en el que se comparó un silo de maíz en el que la planta se cortó a 17 centímetros del suelo y otro en el que se hizo a 39 centímetros: El porcentaje de almidón pasó del 30,6% al 32,4%; la fibra digestible del 50,5 al 54% y la leche producida con la misma ración pasó de 45,2 a 46,7 litros diarios. “Estos datos extrapolados a una ganadería de 100 vacas en ordeño serían unos 30.000 euros más al año”, subrayó.

ANGEL AVILA 5 ALTURA DE CORTE millo

4) Cribado de heces y determinación de almidón en heces.

La cantidad de almidón en una muestra fecal está altamente relacionada con la digestibilidad total del almidón.

En este sentido, Ángel Ávila recordó que varios estudios publicados han encontrado una correlación entre el almidón fecal y la digestibilidad del almidón en silo de entre el 73 y el 94%, dependiendo del marcador interno utilizado en el estudio.

Así, un estudio en la Universidad de Pennsylvania (Estados Unidos) encontró que cada aumento de 1 punto porcentual en la unidad de almidón fecal era equivalente a 0,34 kilogramos de producción de leche perdida.

Como muestra el impacto económico que supone, pasar del 2 al 5% de almidón fecal en un rebaño de 100 vacas en ordeño supone una pérdida económica de unos 165 kilos de leche, es decir, unos 90 euros diarios menos. “El objetivo es que el porcentaje de almidón fecal sea inferior al 4,5%”, destacó.

5) Momento de apertura del silo

El almidón del silo de maíz incrementa su digestibilidad con el tiempo. Como norma general, Ángel Ávila recomendó que los silos no se abran antes de marzo.

Y es que la digestibilidad – y por tanto la producción de leche por KG de materia seca ingerida por la vaca- varía notablemente entre en silo de maíz de 2 meses y uno de 1 año: La digestibilidad del almidón al poco de ser ingerido pasa del 26 al 49% y a las 7 horas se incrementa de un 77 a un 91%.

ANGEL AVILA 6 MOMENTO apertura silo millo

Cuanto más digestible sea el silo de maíz, menos concentrado y mayor rentabilidad

El incremento de la digestibilidad del almidón del silo de maíz también redunda en una menor necesidad de harina de maíz en la ración, con el consiguiente ahorro en costes de alimentación.

Así, Ángel Ávila también hizo referencia a un estudio de la Universidad de Wisconsin que muestra que la mejora de la digestibilidad total del almidón en tracto digestivo en solo 5 puntos reduce la alimentación suplementaria de harina de maíz en 0,7 kilogramos diarios, o lo que es lo mismo, 0,245 euros por vaca menos al día en costes de alimentación. Trasladado a un rebaño de 100 vacas en ordeño representa un ahorro de 8942 euros, a lo que habría que sumar un retorno en la producción de leche perdida al excretarse menos almidón en heces, unos 20.000 euros al año.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Solicitamos su permiso para obtener datos estadísticos de su navegación en esta web, en cumplimiento del Real Decreto-ley 13/2012. Si continúa navegando consideramos que acepta el uso de cookies. OK | Más información