La Real Academia Gallega de Ciencias (RAGC) y la Diputación de Lugo, con la colaboración del Campus Terra de la Universidad de Santiago (USC), inaguran este lunes, 13 de noviembre, las “XXXIV Jornadas Luis Asorey”. Esta edición se centra en “Los castañares: ecosistemas multifuncionales”, a través de una serie de conferencias gratuitas que se desarrollarán entre lo 13 y el 22 de noviembre en el salón de actos de la Diputación de Lugo (calle San Marcos, 8), en horario de 19:00 a 21:00 horas. También podrán seguirse a través del canal de Youtube de la RAGC. Las jornadas están reconocidas por la Consellería de Cultura, Educación, Formación Profesional y Universidades como actividad de formación del profesorado no universitario.
El coordinador de esta iniciativa es Antonio Rigueiro, catedrático emérito de la Escuela Politécnica Superior de Ingeniería de Lugo (Universidad de Santiago), presidente de la Asociación Forestal de Galicia (AFG) y miembro numerario de la RAGC. En la inauguración de las jornadas intervendrán el presidente de la Academia, Juan Lema; y el diputado provincial de Lugo Pablo Rivera Capón.
Esta primera conferencia versará sobre los castañares como sistemas agroforestales. La impartirá el propio Antonio Rigueiro. El profesor pone de relieve que “Galicia es la comunidad española más importante en producción y exportación de castañas. Se cosechan anualmente 20 millones de kilos, de los cuales la mitad se consumen en fresco y el resto se destina a la transformación. Esta producción supone un volumen de negocio que supera los 50 millones de euros una vez comercializada”. Pero, a pesar de esta situación favorable, incide en el hecho de que “las empresas comercializadoras y la industria de la transformación precisan acudir a mercados exteriores para cubrir sus necesidades, ante la insuficiencia de la cantidad y de la calidad de la castaña recogida en Galicia”. Así, “cada año se importan alrededor de diez millones de kilos, principalmente de Portugal, lo que da una idea del potencial que presenta este sector para nuestra comunidad autónoma” -manifiesta-.
Rigueiro asegura que “en Galicia se dan actualmente circunstancias favorables para recuperar este sector”. En esta línea, destaca el apego y el aprecio que existe en el rural por estos árboles -entre otras razones porque la castaña fue en el pasado la principal fuente de hidratos de carbono para la alimentación humana y del ganado doméstico-, la experiencia de los vecinos en el aprovechamiento de este fruto, la diversidad de variedades de la que disponemos, la existencia de una Indicación Geográfica Protegida que defiende nuestro producto en el mercado nacional e internacional, la actividad de empresas con experiencia en la transformación; así como la existencia de buenas condiciones geográficas, climatológicas y de calidad de los suelos en casi toda la región.
El abandono de buena parte de la superficie de castaño se debe sobre todo a la recesión demográfica y al envejecimiento en el rural
En el otro plato de la balanza el profesor sitúa el abandono de buena parte de la superficie de castaño, debido a la recesión demográfica y al envejecimiento de la población en el rural, los problemas sanitarios de este árbol (tinta, chancro, avispilla, antracnosis, perforadores de la castaña…), la atomización de la producción (necesidad de asociacionismo) y desconocimiento o falta de interés por la inversión en este sector.
“La castaña tiene bueno mercado regional, autonómico y mundial y alcanza buenos precios se se oferta un producto homogéneo, que pele bien y, preferentemente, de calibre grande. Y nuestras castañas son muy apreciadas en el comprado nacional e internacional. Además, es un aprovechamiento que nos permite un retorno de la inversión a corto plazo y una renta anual sin tener que esperar al final de la temporada, llegando a proporcionar una tasa de retorno de la inversión de hasta un 12,2% anual” -destaca el experto-.
Los castañares como productores de castañas, madera, setas y lugares de pastoreo del cerdo celta
Por otro lado, el catedrático añade que los castañares son también ecosistemas productores de setas con interés comercial, como las setas (Boletus del grupo edulis) y champiñones (Cantharellus spp.). Y algunas variedades de castaño producen, además de castañas, madera de buena calidad. “Los castañares fueron en Galicia tradicionalmente sistemas agroforestales, pues, como los árboles están muy separados, se cultivaban cereales y otros cultivos entre ellos, siendo apropiados asimismo para establecer sistemas silvopastorales con distintos tipos de ganado, aunque en los últimos lustros se utiliza con frecuencia el ganado porcino de raza autóctona, el cerdo celta” -apunta-.
INSCRIPCIÓN para participar gratuitamente en estas conferencias: PRENSA Real Academia Gallega de Ciencias (RAGC) 981 554 407 / 639 768 929