La presunta ocupación de tierras de montes vecinales por parte de empresas y propietarios particulares ha generado ya al menos una decena de denuncias en los juzgados, según trascendió esta primavera. El problema, que tiene su foco principal en el área metropolitana de Vigo y sur de la provincia de Pontevedra, fue abordado estos días por el propio presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, que a preguntas de los periodistas, abogó por el entendimiento entre las partes, con advertencia de que legislará para buscar una solución al problema.
Esas declaraciones de Rueda sentaron mal en las comunidades de montes, pues consideran que la Administración gallega está ignorando una característica fundamental de los montes vecinales, como es su imprescriptibilidad. “La Xunta de Galicia está poniendo sobre la mesa un debate ya ampliamente superado, como es el de la imprescriptibilidad del monte vecinal, una característica que avala tanto la normativa vigente como la jurisprudencia en la materia y la propia Constitución española”, señala la Asociación Forestal de Galicia en nota de prensa.
La Asociación Forestal, que agrupa a propietarios particulares y comunidades de montes vecinales de toda la comunidad, recuerda que los montes vecinales constituyen un valioso patrimonio a nivel ambiental y cultural: “Es un reto de la sociedad gallega culminar su recuperación y transferirlos en las mejores condiciones a las generaciones futuras”, valoran.
El colectivo recalca que si una superficie fue monte vecinal en el pasado, “no se pierde nunca esa condición porque la imprescriptibilidad del monte vecinal es una característica principal que tiene este tipo de propiedad. Existe innumerable normativa en vigor que hace referencia a esa característica principal y gran cantidad de jurisprudencia reafirmando ese carácter imprescriptible, con ratificación posterior del Tribunal Supremo en aquellos casos que llegaron la esa instancia”, afirma Xosé Luis Campos, vicepresidente de montes vecinales de la Asociación Forestal de Galicia.
Otro argumento de la Asociación Forestal de Galicia es que la Constitución española califica como imprescriptibles a los montes comunales, “por lo que se puede considerar que la propia Constitución española apoya el criterio de imprescriptibilidad de los montes vecinales que, sin ser comunales, tienen muchas características afines con ellos”.
Así las cosas, la Asociación Forestal de Galicia tacha de “desafortunadas” las palabras del presidente de la Xunta: “Criticar sentencias judiciales, asegurando al mismo tiempo que se regulará en sentido contrario a esas sentencias, de forma que se acabará eliminando la característica principal del monte vecinal, no es defendible desde el punto de vista del interés general”, concluye Xosé Luis Campos.
Problemas con los jurados provinciales de montes vecinales
La Asociación Forestal de Galicia cuestiona además el comportamiento que están manteniendo en los últimos tiempos los jurados provinciales de montes vecinales, dependientes de la Xunta. “Se está observando que el criterio de estos jurados está siendo, de forma general, no clasificar como comunales superficies con usos distintos al forestal, lo que obliga a acudir a la justicia ordinaria, donde se confirma que son decisiones contrarias a Derecho”, advierte el colectivo en nota de prensa.