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Las instituciones europeas han llegado hoy a un acuerdo sobre la próxima Política Agraria Común (PAC), que se espera que sea más justa a nivel social, más ecológica y más respetuosa con los animales. La principal cuestión que destaca en el nuevo ciclo de la PAC, que se iniciará a partir del 2023, es la apuesta por ambiciones ambientales y climáticas más elevadas, en la línea de los objetivos del Pacto Verde (Green Deal).
La nueva PAC busca además una distribución más justa de los apoyos, por lo que el 10% del presupuesto se destinará a pagos redistributivos que beneficiarán a pequeñas y medianas explotaciones. También se marca un mínimo de un 3% de presupuesto para apoyar a los agricultores jóvenes menores de 40 años.
Sobre la base del acuerdo europeo, cada Estado miembro definirá en lo que queda de año una propuesta de Plan Estratégico Nacional, que marcará las condiciones de aplicación de la PAC en cada país.
Estas son las principales cuestiones pactadas por las instituciones europeas para el nuevo ciclo de la PAC.
– Pagos redistributivos. Será obligatorio que los Estados miembros destinen por lo menos un 10% del presupuesto de la PAC en beneficio de las explotaciones más pequeñas. Deberán describir en su Plan Estratégico Nacional cómo planean hacerlo.
En España, el Ministerio de Agricultura ya había anunciado pagos redistributivos para las pequeñas y medianas explotaciones, en la idea de ofrecer pagos suplementarios a las primeras hectáreas, si bien está en el aire cómo se va implementar.
– Apoyo a agricultores jóvenes. Se destinará un mínimo del 3% del presupuesto de la PAC de cada Estado miembro a apoyar a los agricultores jóvenes, menores de 40 años. Ese presupuesto cubrirá ayudas a la renta, inversiones y apoyo a la incorporación.
– Condicionalidad social. Para cobrar la PAC, se controlará que los beneficiarios respetan la legislación laboral y social europea.
PAC más ecológica
Europa anuncia una agricultura más sostenible, con mayor ambición por el clima, el medioambiente y el bienestar animal, en línea con el Green Deal (Pacto Verde), la estrategia europea ‘De la granja a la mesa’ y la de biodiversidad.
– Condicionalidad. Se endurecerán los requisitos mínimos para cobrar la PAC. Por ejemplo, Europa quiere que cada productor dedique por lo menos el 3% de la superficie cultivable a la protección de la biodiversidad y a elementos no productivos, con la posibilidad de recibir apoyos a mayores (ecoesquemas) para conseguir porcentajes de un mínimo del 7%.
– Ecoesquemas. Los Estados miembro destinarán un 25% de los apoyos a la renta a ecoesquemas, un instrumento que compensará a los productores por implementar prácticas respetuosas con el clima y el medioambiente, así como por mejoras en el bienestar animal.
En España, el Ministerio de Agricultura ya avanzó un primer borrador de ecoesquemas, pero deberá concretarlo en los próximos meses. Se espera una Conferencia Sectorial del ministro con los consejeros autonómicos del ramo en la primera quincena de julio, que será donde se aborde este y otros temas, de cara a definir el Plan Estratégico Nacional.
– Fondos para compromisos agroambientales. Se mantendrán las líneas de ayudas agroambientales del segundo pilar de la PAC (Plan de Desarrollo Rural) y por lo menos un 35% de los fondos del segundo pilar deben destinarse a fomentar prácticas que mejoren el clima, el medioambiente y el bienestar animal.
En el caso de Galicia, el sector está pendiente de la definición de los ecoesquemas y de las agroambientales, pues habrá que evitar solapamientos entre ambas líneas de ayudas.
