Los ecos de las protestas agrarias que recorren Europa llegan a España. Los sindicatos ASAJA, COAG y UPA acuerdan reclamar un ambicioso plan de choque que recoja medidas a tres niveles: Unión Europea, Gobierno de España y comunidades autónomas.
Mediante un comunicado conjunto, este martes han anunciado la puesta en marcha de un calendario de movilizaciones, aunque sin aclarar en qué consistirían ni cuándo tendrían lugar. Los actos de protesta se desarrollarán en el ámbito de las comunidades autónomas durante las próximas semanas, avanzan únicamente.
A nivel estatal, los tres principales sindicatos agrarios han llegado a un acuerdo para solicitar al ministro de Agricultura, Luis Planas, soluciones inmediatas para abordar las problemáticas del sector, en todo aquello relacionado con las consecuencias de la sequía, la guerra en Ucrania, precios y costes de producción, simplificación y flexibilidad de la PAC, sectores ganaderos y cuestiones laborales y de Seguridad Social.
La asfixiante burocracia que generan las normativas de la UE provocan una frustración y malestar creciente entre los productores
Entre las razones que esgrimen está la «asfixiante burocracia que generan las normativas de la UE», que desencadenan una «frustración y malestar creciente entre los productores. «La excesiva burocracia está suponiendo unos costes inasumibles para los agricultores y ganaderos profesionales y no posibilitan cumplir los objetivos en materia medioambiental, por lo que reclamamos una flexibilización y simplificación de la actual PAC, esto incluye tanto los ecorregímenes como las condiciones para el cobro de ayudas (BCAM)», argumentan.
Refuerzo de la Ley de la Cadena Alimentaria
Por otro lado, UPA, ASAJA y COAG reclaman la modificación y ampliación de la Ley de la Cadena Agroalimentaria para prohibir las prácticas desleales para que los precios de los agricultores cubran los costes de producción. Asimismo, la AICA (Agencia de Información y Control Alimentario, dependiente del Ministerio de Agricultura) «debería de aplicar sanciones económicas más acordes a la infracción sometida», defienden.
La AICA debe actuar con inspecciones de oficio a través de indicios
Piden además que se amplíen los recursos de control. «La AICA debe actuar más a través de los indicios y por lo tanto con inspecciones de oficio. Se debe recuperar en los indicios la temática de los precios anormalmente bajos, como es el caso ahora mismo del limón», ejemplifican.
«En España, la Ley de la Cadena Alimentaria se debe reforzar para conseguir su máxima aplicación. El Observatorio de la cadena debe publicar los índices de precios y costes; además se deben actualizar todos los estudios de cadena de valor realizados hasta ahora», proponen.
Freno a las importaciones
Asimismo, ASAJA, COAG y UPA van a exigir al Ministerio de Agricultura un observatorio sobre las importaciones y que se refuerce la batalla en Bruselas para exigir reciprocidad, mediante cláusulas espejo, en todos los productos agrícolas y ganaderos que entren al territorio UE.
“Los agricultores luchan frente a un mercado desregulado que importa productos agrarios de terceros países a bajo precio que presionan a la baja los de la UE y a los producidos en España. Estas producciones extracomunitarias no cumplen las normativas internas de la UE y representan una contradicción e hipocresía en la actuación política de la UE. Una competencia desleal que pone en jaque la viabilidad de miles de explotaciones”, subrayan las tres organizaciones agrarias.
Los agricultores luchan frente a un mercado desregulado que importa productos agrarios de terceros países a bajo precio
Sin embargo, la UE sigue cerrando más acuerdos de libre comercio con terceros países, que agudizan los problemas de los agricultores y ganaderos de toda la UE. En este sentido, COAG, UPA y ASAJA, van a reclamar la paralización de las negociaciones de acuerdos como del MERCOSUR, la no ratificación del acuerdo con Nueva Zelanda y que se paralicen las negociaciones con Chile, Kenia, México, India y Australia.
Además, el Gobierno de España, con la supervisión de la Comisión Europea, debería aumentar los controles en la frontera con Marruecos para garantizar que los productos agrícolas marroquíes importados cumplen con las normativas internas de la UE y las cantidades arancelarias establecidas en el acuerdo de libre comercio. “Es vital recuperar la preferencia comunitaria para recuperar y garantizar nuestra soberanía alimentaria”, sostienen las tres organizaciones agrarias.
Incorporación de jóvenes
A nivel de Gobierno y comunidades autónomas se exige un reforzamiento real de los mecanismos de incorporación de jóvenes para propiciar el relevo generacional, de modo que ninguna solicitud de incorporación de jóvenes quede sin efectuarse por falta de presupuesto, frenar la especulación y la compra de tierra que están realizando los fondos de inversión y agentes fuera del sector agrario, por ejemplo para la instalación de placas solares. «Debe replantearse la instalación de energías renovables en terrenos agrarios», defienden.
Además, en el ámbito de sus competencias, a las comunidades autónomas se les demandan reformas urgentes en cuanto a la simplificación de los trámites burocráticos que ahogan a los profesionales del campo.
Los ganaderos también señalan la situación crítica que están generando las cuestiones de sanidad animal, un asunto que ha sido objeto en ocasiones de lucha partidista y en la que los ganaderos son “víctimas inocentes”, por lo que exigen una política de sanidad animal «coordinada, seria y coherente».