Ocho claves para la siembra del maíz forrajero en Galicia

El equipo técnico de la Cooperativa Agraria Provincial de A Coruña, ofrece unas recomendaciones para la siembra del maíz en Galicia

Ocho claves para la siembra del maíz forrajero en Galicia

La dosis de siembra y la profundidad son muy importantes.

Las altas temperaturas y la falta de precipitaciones están provocando que este año se adelante considerablemente la siembra del maíz forrajero en Galicia, el principal forraje de las ganaderías de vacuno de leche de la comunidad.

En este sentido, desde el equipo técnico de la Cooperativa Agraria Provincial de A Coruña, con unas 60 explotaciones lácteas en gestión, ofrecen unas recomendaciones clave para mejorar los rendimientos de este cultivo.

1)Evaluar si el cultivo es rentable. Tenemos que tener en cuenta si compensa sembrar maíz en una parcela o en una zona con escasos rendimientos y altos costes. Por debajo de un rendimiento de 30 toneladas de materia húmeda por hectárea no sería rentable sembrar maíz forrajero, porque su coste sería superior a comprar silo de maíz -con un precio que ronda entre los 50 y los 54 euros la tonelada- o harina de maíz. Dedicar esas parcelas a hierba o a otro cultivo menos exigente (girasol o una combinación de girasol con sorgo) podría ser una alternativa más rentable para la ganadería.

2) Estado de la tierra. Para la siembra del maíz es muy importante que la tierra esta en tempero, es decir que no esté húmeda, para evitar la formación de terrones y de grietas con el calor, lo que dificultaría la nacencia y desarrollo de la planta de maíz. La temperatura de la tierra debe estar como mínimo entre 12 y 13 grados, por lo que a veces sembrando antes no adelantamos más.

3) Elección de la variedad. Adaptarla a la zona y a la rotación de cultivos, a la época en la que sembramos y a los cortes de hierba y rendimiento de maíz que queremos recoger. “En una rotación maíz-hierba-maíz, deberíamos tener un ciclo de 130 o 135 días, lo que vendría a ser un ciclo de 220 a 250”, aseguran los técnicos de Cap-Coruna. Las explotaciones que tienen más superficie podrían ir a variedades de maíz con más mazorca, para lograr una relación más alta de almidón.

4) Abonado. Es muy importante tener analíticas del suelo de cada parcela para poder abonar en función de las necesidades del cultivo y del estado de la finca. También encalar la parcela, en función del PH de la misma. El purín de la propia explotación ocupa el primer lugar del plan de abonado, y si no es suficiente añadir abono de síntesis. “No recomendaríamos abonar sólo con el purín, sino que complementaría con un nitrógeno. A nosotros nos gusta el abono blending porque se adapta a las necesidades de cada parcela y tiene una buena relación aporte/precio”, aseguran desde el equipo técnico de la Cap Coruna.

5) Dosis de siembra adecuada. Debe estar entre las 85.000 y las 90.000 plantas por hectárea.

6) Profundidad de siembra. Hasta el 15 de mayo puede ser más superficial, a entre 4 y 6 centímetros, pues la tierra aún retiene bastante humedad en un año normal desde el punto de vista climatológico. A partir de 15 de mayo las siembras del maíz deben ser la entre 8 y 10 centímetros para asegurar la humedad necesaria para la germinación.

También es muy importante a velocidad de siembra, de alrededor de 7 o 8 kilómetros por hora.

7) Vigilar las parcelas de maíz en los 20 días posteriores a la siembra. “En los 15 el 20 días después de la siembra es imprescindible visitar las parcelas para detectar problemas de rosquilla o de otros insectos o del jabalí, y poder de esta forma actuar a tiempo”, recomiendan.

8) Importancia de tener un cultivo en invierno. Una parte significativa de las parcelas (aquellas que están más lejos de la explotación, o en las que se recoge el maíz tarde y se encharcan más fácilmente) no tienen un cultivo en invierno, repitiéndose maíz tras maíz cada año. “Estamos viendo que en estas parcelas, tras ocho o diez años repitiendo maíz tras maíz y quemando con glifosato antes de la siembra, los rendimientos de la cosecha de maíz se están resintiendo, por lo que nuestra recomendación es sembrar siempre un cultivo en invierno, por ejemplo nabos o guisantes para enterrar, con lo que estaremos mejorando la fertilidad y la salud del suelo, y recuperando rendimientos del maíz”, explican desde el equipo técnico de la CAP Coruna.

“También es importante no pasarnos con las dosis de los herbicidas de pre o post emergencias pues de lo contrario tendremos problemas de germinación de las praderas, un problema que estamos viendo cada vez más”, advierten.

Variación de la producción de maíz forrajero en las explotaciones de Cap Coruña:

Producción

Coste €/ton de materia verde

Producción

Coste

Kg de materia verde por hectárea

Kg de MS (35%)

Euros por tonelada de Materia Seca (MS)

50000

29,32

17500

83,77

45000

32,58

15750

93,08

40000

36,65

14000

104,71

35000

41,89

12250

119,67

30000

48,87

10500

139,62

25000

58,64

8750

167,54

Más información: Ensayos del CIAM con variedades de maíz forrajero en Galicia

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