“Plantar chopo es viable económicamente, hay una gran demanda de esta madera”

¿Es el chopo una opción a tener en cuenta para realizar una plantación? En la firma Garnica, una de las empresas centradas en el aprovechamiento de esta madera en España, tienen claro que es una alternativa con mucho futuro. “Plantar chopo es muy viable económicamente, hay una gran demanda de esta madera”, apuntó Joaquín Garnica, uno de los responsables de las plantaciones del grupo, durante unas jornadas celebradas recientemente en Lugo, centradas en las posibilidades del chopo para desenrollo y organizadas por el Distrito Forestal IX Lugo-Sarria.

Castilla y León, La Rioja, Aragón o Navarra son algunas de las zonas con una mayor tradición y producción de madera de chopo, pero su elevada demanda hace replantearse que su cultivo pueda extenderse a otras regiones. El precio que alcanza su madera es también un atractivo para los productores forestales, aunque tal y como explican los expertos, la chopera requiere una gestión activa, sobre todo en los primeros seis años, para lograr buenos resultados.

Gran demanda

La firma ha ido constatando a lo largo de su trayectoria la creciente demanda de esta madera. Desde que su fundador aprovechó la gran cantidad de madera que el paso de un tornado había dejado tirada en la vega del Río Najerilla (La Rioja) para abrir un primer aserradero, en el año 1941, la empresa ha ido transformándose y abriendo plantas centradas en procesos de industrialización del chopo, lo que le ha permitido comprobar el aumento de la demanda de contrachapado de chopo en mercados como el holandés, el alemán o el americano en los últimos 30 años.

“Hace falta mucha materia prima. El chopo tiene una gran demanda”

En Castilla y León con solo el 2,4% de la superficie forestal arbolada de la región, el chopo representa el 20% de las cortas de madera y cerca del 40% del valor económico obtenido de la actividad maderera en la comunidad. En el caso de La Rioja, con el 1.5% de la superficie forestal arbolada se obtiene un 44% de las cortas y un 70% del valor de la madera cortada. En Navarra, con solo un 0.4% de la superficie arbolada se llega al 13% del volumen de cortas y al 30% del valor total de las cortas de madera.

Los cuidados de la chopera

El cultivo de chopo podría encontrarse a medio camino entre las plantaciones forestales y las agrícolas, tanto por su ciclo de corta relativamente corto, que se sitúa en torno a los 15 años, así como por la silvicultura que requiere esta especie para lograr un óptimo crecimiento y madera de calidad. “El chopo es una plantación que precisa de una gestión activa. Hay que gradear el suelo y podar durante al menos los 6 primeros años para conseguir una correcta formación de los chopos y obtener madera de calidad”, especifica Garnica.

“El chopo es una plantación que precisa de una gestión activa. Hay que podarlo y gradar el suelo para conseguir un buen crecimiento”

La gestión activa que requiere este árbol hace que para muchos sea una alternativa a tener en cuenta contra el abandono de la tierra. “Necesitamos situar las fábricas cerca del recurso forestal y gracias al chopo generamos cerca de 1.000 empleos directos en zonas rurales”, apunta.

Las choperas también pueden generar otros beneficios en el medio. «Para nosotros el chopo y el río son perfectos aliados. El chopo depura el exceso de nitratos provenientes de la agricultura, captura CO2, forma corredores naturales para la fauna y a su vez es una especie para zonas con riesgo de inundación donde otros cultivos son arrasados por las inundaciones periódicas», reivindica Garnica. 

Precios y destino del chopo

Tanto los costes de la planta como el valor de la madera de chopo se alejan considerablemente de otras especies forestales. El precio también varía en función de la calidad de la madera y de los cuidados que haya recibido durante su crecimiento. En Castilla y León el metro cúbico de madera de chopo para desenrollo en pie puede oscilar entre los 55 y los 100 euros, dependiendo de la calidad de la madera.

“La plantación de chopo es rentable por si misma, pero creemos que los beneficios sociales y ambientales que genera deberían ser fomentados mediante sistintas medidas, como pueden ser la eliminación de cánones, la agilización de trámites burocráticos, con subvenciones o con desgravaciones de IVA” comenta el gerente.

La madera de chopo en pie puede situarse en una media de entre 65 y 70 euros el metro cúbico

En Castilla y León los chopos con más de 35 centímetros de diámetro y que han recibido unos cuidados adecuados pueden llegar a superar los 100 euros por metro cúbico en las subastas públicas. “La madera de chopo en pie puede situarse en una media de entre 65 y 70 euros el metro cúbico, lo que lo hace imbatible frente a otras especies forestales cultivadas en España”, concreta Garnica.

El aprovechamiento principal de la madera de chopo es el desenrollo para producción de tablero contrachapado, ya que es el producto que le da mayor valor añadido a la madera de chopo. Los diámetros menores a 22 cm se venden como subproducto para otros usos como fabricación de palets o biomasa.

Con la vista puesta en la mejora genética

Garnica lleva casi 25 años plantando chopos en las cuencas del Ebro y el Duero. «Gestionan más de 1.500 hectáreas de choperas. Este año plantaremos cerca de 300 hectáreas y el objetivo es incrementar nuestro ritmo de plantación. No solemos plantar menos de 5 hectáreas o realizar agrupaciones en la zona”, reconoce el gerente. Buena parte de sus plantaciones son realizadas a través de consorcios con los Juntas Vecinales, Ayuntamientos o propietarios privados.

La selección de la planta es otro de los factores claves para el éxito de la plantación y al igual que ocurre con otras especies, la selección de clones resistentes a enfermedades está siendo un criterio que cada vez tiene mayor peso.

Investigan con 150 clones para obtener variedades resistentes a enfermedades como la roya, que condiciona el desarrollo del chopo

En Bosques y Ríos, la firma dentro del grupo Garnica encargada de las plantaciones, están trabajando en estos momentos con 150 clones para determinar cuáles son las variedades con mejores resultados en cuanto a productividad, calidad de madera y resistencia a enfermedades. Se trata de un trabajo que están realizando en colaboración con algunos de los centros de investigación europeos más destacados y para el que tienen unas 25 parcelas en las cuencas del Duero y el Ebro. “Nuestra experiencia con los clones italianos está siendo muy buena”, apunta Garnica.

El precio de estas plantas es también sensiblemente superior. Así, mientras el precio de variedades sin protección vegetal que manejan en Garnica puede oscilar entre 1,50 y 2,10 euros por planta dependiendo de la variedad, los ejemplares que están importando desde Italia se sitúan en los 3 euros. “Nosotros hay clones como el Beaupre que hemos dejado de plantar y aconsejar por la afección de la roya, una de las principales enfermedades del chopo, y que condiciona en gran medida el desarrollo del chopo”, concreta el gerente.