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Los dos primeros positivos en Galicia por la Enfermedad Hemorrágica Epizóotica (EHE) fueron confirmados ayer por las Administraciones, con sendos casos en A Capela y en Abegondo (A Coruña). Desde las organizaciones agrarias piden medidas inmediatas para abordar las pérdidas que sufrirán las explotaciones, así como los gastos de tratamientos y desinsectación. Desde el Sindicato Labrego piden que Agroseguro incluya tanto la lengua azul como la EHE en sus pólizas.
Por parte de Unións Agrarias y de la Fruga se solicita que la Xunta compense a las ganaderías por las pérdidas, los tratamientos de los animales afectados y por los gastos de desinsectación. El Sindicato Labrego además da cómo seguras nuevas notificaciones de positivos en los próximos días, que estarían a la espera de la confirmación del Laboratorio de Algete (Madrid), y pide una actuación decidida de la Xunta para encarar el problema.
La EHE se trata de una enfermedad que afecta al ganado vacuno y que en general, presenta unos síntomas clínicos moderados, percibiéndose por algunas de las siguientes incidencias: fiebre, pérdida de apetito, edema facial, secreción ocular y/o nasal, salivación, dificultad respiratoria, eritema o descamación en boca y nariz, cojera o eritema de la ubre. Son síntomas que normalmente desaparecen en aproximadamente dos semanas. En cuanto al ganado ovino y caprino, no hay constancia de enfermedad clínica en los animales.
La mortalidad en las granjas afectadas está por debajo del 1% sobre el total del rebaño, en tanto los síntomas se producen en un 7,56% del rebaño, de media. En este sentido, conviene señalar que la EHE es una enfermedad infecciosa pero no contagiosa, producida por un virus que se transmite a los animales exclusivamente a través de la picadura de mosquitos del género Culicoides,spp.
Dada la vía de transmisión, esta enfermedad aparece mientras exista el mosquito vector circulando en el ambiente. Por lo tanto, existe un período de posible afectación de los animales (aproximadamente de abril a diciembre) y otro, en los meses de invierno, en los que al no existir circulación del vector, no existe posibilidad de infección en los animales.
La única vía de contagio en los animales es a través de la picadura de los mosquitos transmisores, por lo que no es posible la transmisión directa o indirecta entre ellos. Además, es preciso aclarar que esta dolencia no afecta a las personas, ni por la picadura del mosquito transmisor, ni por contacto con animales infectados, ni por el consumo de productos de origen animal (carne, leche…) de estos animales.
Desinsectación y movimientos de animales
Al no existir ni vacuna ni tratamientos específicos curativos, la principal medida a tomar es preventiva, con la desinsectación de las instalaciones. Estos son los insecticidas autorizados para uso ganadero.
En el caso de detectar animales con sintomatología compatible con la enfermedad, debe comunicarse esta circunstancia de manera inmediata a los servicios veterinarios oficiales de la Consellería de Medio Rural.
Por otra parte, los movimientos de animales de Galicia hacia el resto de Europa con destino vida quedan prohibidos, si bien sí podrían salir animales dirigidos al sacrificio. Se mantiene la circulación normal hacia el resto de España de ejemplares para vida y para sacrificio, así como para las zonas de Portugal afectadas por la EHE, país con el que hay un acuerdo en tal sentido.
