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La asociación de ganaderas y ganaderos Agromuralla considera «intolerables e inaceptables» las declaraciones del secretario general de la Federación Nacional de Industrias Lácteas, Luis Calabozo, culpando al precio de la leche en origen de la pérdida de competitividad del sector lácteo en España.
Para el presidente de Agromuralla, José Luis Pérez Barreiro, con este tipo de declaraciones «las industrias tratan de poner a los consumidores en contra de los ganaderos que producimos la leche, acusándonos de ser los culpables del encarecimiento de la cesta de la compra, cuando la realidad es que este año nos han bajado un 20% el precio que nos pagan por la leche a los productores sin que haya bajado nada en los supermercados».
Para producir necesitamos estabilidad en los precios, porque una ternera no se cría en 5 meses ni un establo se paga en un año
Según denuncia Agromuralla, «las industrias lácteas tienen en marcha en este momento un complot para bajar la leche a los ganaderos» y cuentan «con la connivencia de las Administraciones públicas», pues «ni la Xunta ni el Ministerio están moviendo un dedo en favor de los productores, permitiendo bajadas unilaterales impuestas por las industrias y que incumplen la Ley de la Cadena Alimentaria».
«Las empresas quieren hacerse ricas a costa de los productores», denuncia Pérez Barreiro, que acusa a la FENIL de proponer «un sector lácteo tercermundista para España, donde las industrias obtengan sus beneficios a base de comprar la materia prima barata».
Las empresas quieren un sector lácteo tercermundista para España, donde las industrias obtengan sus beneficios a base de comprar la materia prima barata
«Tanto las industrias como las cadenas de supermercados están presentando sus cuentas del año pasado con datos de facturación récord en todos los casos», recuerda el presidente de Agromuralla, que dice que «los que arruinan las empresas lácteas no son los ganaderos sino sus directivos».
Cinismo con las importaciones
José Luis Pérez Barreiro acusa también a las industrias de «cinismo» a respecto de las importaciones de leche, queso y otros productos lácteos. «Las industrias son las principales culpables de que España sea deficititaria en leche y son las primeras en comprar fuera; de hecho ahora están bajándonos el precio de la leche a los ganaderos en España porque prefieren traer leche y quesos baratos de otros países», dice.
España es un país deficitario en producción de leche que se ve obligado a comprar una cuarta parte de los productos lácteos que consume; es normal que aquí se pague más por la leche que en otros países
Agromuralla considera normal que el precio de la leche en España sea superior al de otros países de la UE que son excedentarios, caso de Alemania, Francia u Holanda y recuerda que «España es un país deficitario en producción de leche que se ve obligado a comprar más de una cuarta parte de los productos lácteos que consume».
La producción total española es unos 7,3 millones de toneladas y las importaciones suponen 2 millones de toneladas más, por lo que «el precio que se paga a los ganaderos debería reflejar esa realidad», argumenta Pérez Barreiro.
«Los costes de producción de las granjas siguen aumentando por la adaptación a las nuevas normativas»
Mientras los ingresos de las granjas siguen bajando, después de tres descensos en el precio de la leche en lo que va de año, los costes de producción de las explotaciones no dejan de aumentar.
«El precio del gasóleo para la actual campaña de ensilado del maíz y siembra de las praderas se ha disparado hasta 1,30 euros el litro, las semillas han multiplicado el precio, la paja sigue por las nubes y la electricidad está volviendo a subir», enumera el presidente de Agromuralla, que pide que los contratos de compra de la leche se referencien a los costes de las granjas.
El Cuaderno Digital, la nueva PAC o la adaptación de las cisternas de purín suponen un encarecimiento de lo que cuesta producir cada litro de leche que no se compensa vía precio
Además del encarecimiento de los insumos básicos, la adaptación a los requisitos de la nueva PAC y la entrada en vigor de normativas en materia materia de medio ambiente, bienestar animal y digitalización requieren inversiones a los productores.
«La adopción del Cuaderno Digital o la modificación de las cisternas de purín para cumplir con el Real Decreto de fertilización supone un encarecimiento de lo que cuesta producir un litro de leche, sin que en este momento esos costes se vean compensados vía precio», asegura.
Si los precios siguen bajando caminamos hacia un nuevo desabastecimiento por el cierre masivo de granjas
Por eso, Pérez Barreiro apela a la responsabilidad de las empresas compradoras para garantizar el relevo generacional y el mantenimiento del sector productor, porque, asegura, «si las granjas volvemos de nuevo a los números rojos caerá la producción y cerrarán más explotaciones».
«Vamos nuevamente camino del desabastecimiento, porque una ternera no se cría en 5 meses ni un establo se paga en un año; necesitamos estabilidad de precios y rentabilidad», defiende.
