La certificación forestal, un sistema que trata de acreditar una correcta gestión social y ambiental de los bosques, está ganando peso en los últimos años. Grandes compañías como Ikea o Inditex exigen la certificación forestal para la madera, embalajes y papel que emplean. Esta demanda afecta a toda la cadena de la madera y en último término, llega al propietario forestal gallego, que se beneficia de un mayor precio de hasta 3-4 euros por tonelada en la madera certificada.
Uno de los dos sellos de certificación forestal que opera en Galicia es FSC, que tiene certificadas en la comunidad alrededor de 60.000 hectáreas de monte. Estos días, FSC España ha celebrado en Galicia su asamblea anual, en la que entrevistamos al director para Europa de FSC Internacional, Anand Punja, con el que abordamos cuestiones como la investigación que está acometiendo FSC en la cadena del eucalipto en España y en Portugal, en la que detectaron indicios de irregularidades.
FSC anunció recientemente que ha identificado riesgos en la cadena del eucalipto en cuanto a “volúmenes dispares, operaciones inexactas y, por lo tanto, posibles declaraciones falsas”, por lo que ha iniciado un proceso de verificación de todas las operaciones de compra y venta del segundo semestre de 2018, a fin de comprobar que no hay madera sin certificar que entre en la cadena de certificación FSC.
– Empecemos hablando de la demanda de madera certificada, que está en ascenso en los últimos años, en buena medida por exigencias del mercado. ¿Qué perspectivas tienen para próximos años en el consumo de productos certificados?
– Los indicadores que tenemos apuntan a que la demanda de productos certificados seguirá creciendo. El mercado entiende lo que representan los valores de FSC y por qué somos diferentes de otras iniciativas.
Los consumidores no quieren realmente ser bombardeados por multitud de sellos diferentes ni tienen tiempo para investigar el origen de los productos que compran. Quieren tener confianza en las compañías con las que trabajan y FSC es una certificación que genera confianza en que las compañías con nuestro sello están haciendo lo correcto en su suministro de materias primas del bosque.
Nuestro objetivo es cubrir el mayor rango posible de productos procedentes de los bosques, tanto para grandes empresas como para las empresas más pequeñas.
– FSC tiene una presencia destacada en países europeos y Norteamérica, pero su presencia es menor en los países del Sur. ¿Cómo ve el problema de la madera ilegal que llega a Europa de bosques tropicales y qué puede hacer FSC para reducir esta situación?
– Lo primero que hay que destacar es que nuestro principio fundamental es la legalidad. Forma parte de nuestros valores. En muchos países del Sur, hay un problema de gobernanza relacionado con la capacidad de implementar políticas. Y ahí es donde FSC puede ayudar, funcionando en cierta forma como una subcontrata. Tenemos casos como Gabón, en donde su presidente anunció que toda concesión a empresas madereras debe realizarse con las garantías de FSC, por medio de la certificación forestal de todo el proceso.
«Los países tropicales quieren asegurar la sostenibilidad de sus bosques a largo plazo y ven a FSC como un aliado en ese objetivo»
La visión que tienen de los bosques países como Gabón es que quieren que sus bosques sean sostenibles a largo plazo y ven a FSC como un sistema que puede ayudarles a lograr ese objetivo, pues podemos asumir la responsabilidad de monitorear en el terreno la gestión forestal.
– La certificación forestal FSC siempre fue reconocida por su peso ambiental y tradicionalmente venía contando con el respaldo de las organizaciones ecologistas, pero en 2018 Greenpeace decidió abandonar FSC. ¿Cree que esa situación se puede reconducir?
– Es cierto que a nivel internacional Greenpeace dejó FSC, pero se trata de una organización muy descentralizada y en muchos países Greenpeace sigue siendo miembro de FSC, como pueden ser los casos de Nueva Zelanda, Canadá o algunos países europeos.
La cuestión principal es que Greenpeace quiere plantear un desafío más profundo al modelo de consumo. No cree que sea suficiente el reto de FSC, que es la promoción de un consumo más responsable. Greenepeace se orienta a promover la reducción del consumo y el reciclaje, que es un desafío que también nos parece interesante.
Quizás Greenpeace no pueda promover los cambios que desea a través de FSC, pero aún así, recomienda a los consumidores que se aseguren de que un producto es FSC cuando compran un producto nuevo con materias primas procedentes de bosques. Así que, en definitiva, continuamos teniendo apoyo de Greenpeace.
– FSC ha anunciado recientemente que está desarrollando una verificación de operaciones de la cadena del eucalipto en Portugal y España. ¿Han detectado irregularidades en la certificación de la madera de eucalipto?
– Realmente no puedo ofrecer una buena respuesta sobre este tema porque aún no sabemos lo suficiente. Tenemos una unidad especializada que trabaja en estas cuestiones y lo que sabemos por el momento es que hay indicios de problemas que debemos analizar. No sabemos cómo de grande o pequeño es el problema. Por eso estamos haciendo una investigación para averiguar qué ha sucedido y trabajar con las partes interesadas para encontrar soluciones.
– ¿Qué desafios destaca para el futuro en la certificación FSC?
– Un reto claro es convertir el sistema FSC en más accesible para propietarios y gestores forestales. Debemos simplificarlo, pero de forma que siga siendo un sistema creíble. Simplificar no significa convertirlo en más fácil, sino buscar diferentes formas de acceso al sistema. Debemos encontrar un equilibrio entre la simplificación y las seguridades que aporta la certificación.
Pero el desafío más grande es cambiar las actitudes, la percepción de lo qué es FSC y cómo puede ayudar a propietarios y gestores forestales en el mercado de la madera.
Aumento de la certificación forestal en Galicia en montes de gestión pública
El director general de Planificación y Ordenación Forestal, José Luis Chan, mantuvo un encuentro de trabajo con representantes del sistema de certificación forestal FSC para analizar la situación actual del mercado de la madera y de los productos transformados en Galicia. En el encuentro, el director general avanzó que se va a poner en marcha en las próximas semanas un proceso de certificación en montes de gestión pública.
Chan destacó la importancia de estos sellos de certificación para garantizar el acceso de la madera a los mercados, al tiempo que garantiza también la propia sostenibilidad y gestión de los montes. De ahí, señaló, que sea necesario realizar un esfuerzo conjunto por incrementar las superficies forestales certificadas en Galicia.