Masiva tractorada esta mañana de los productores de leche en Vilalba, capital de la Terra Cha, una de las comarcas con más explotaciones lácteas de Galicia. Alrededor de 1.000 tractores y unos 3.000 manifestantes volvieron a exigirle tanto a la Xunta de Galicia como al Gobierno Central una intervención decidida para obligar a que industria y distribución se pongan de acuerdo para pagarles unos precios mínimos que cubran los costes de producción.
Desde las once de la mañana comenzaron a llegar a la capital chairega cientos de ganaderos en sus tractores procedentes de toda la comarca. La afluencia fue tan masiva que desbordó las previsiones de aparcarlos en el Campo da Feira y hubo que buscar aparcamientos alternativas. Esto demoró la lectura del manifiesto, en la plaza del Ayuntamiento, hasta pasadas las dos de la tarde.
«No puede ser, el precio del agua, más caro que la leche»
El apoyo del comercio de Vilalba fue masivo,lo que demuestra la importancia del sector lácteo para la economía de las villas del rural gallego. Prácticamente todo el comercio vilalbés cerró sus puertas esta mañana en solidaridad con los ganaderos.
La manifestación, que salió de la Estación de Autobuses pasadas las doce del mediodía, transcurrió en un ambiento pacífico y con numerosos vecinos de Vilalba que llenaron las aceras para mostrar su apoyo al sector productor lácteo. También acudieron representantes políticos del PsdeG-PSOE, encabezados por su secretario general, Xosé Manuel Gómez Besteiro, del BNG o deAGE, como la eurodiputada Lidia Senra, e incluso algún diputado provincial del PP.
Junto a los ya habituales lemas de «Precios justos para nuestra leche» también se escucharon otros como «Leche regalada, ganadero arruinado», «Basta de tanto robar, nuestra leche la hay que pagar» o «Esto va mal, señor presidente, el precio del agua, más caro que la leche».
«Si en Francia es posible, aquí también»
El manifiesto fue leído por el periodista vilalbés Fidel Fernán, quien subrayó que «la lucha del sector lácteo es la lucha contra emigración de nuestra juventud (…..) porque luchamos por nuestro futuro y por el de las generaciones que vienen detrás, por algo que es de justicia».
Criticó que «la administración no está a la altura de las circunstancias, (…), con un gobierno que se niega a intervenir para garantizar unos precios justos para los productores y que se limita a pedirle buena voluntad a la industria y a la distribución dejando indefensos a los ganaderos».
«La administración no está a la altura de las circunstancias»
En este sentido, Fidel Fernán, recordó que «en Francia fue posible y aquí también tiene que ser posible que las industrias dejen de pagar precios ruinosos a nuestros ganaderos».
Testimonios de ganaderos
Diego es un joven ganadero de Cambás (Aranga-A Coruña). Tiene una explotación de tamaño mediado y reconoce que «hay ganaderos que están sufriendo más que yo en el precio. Nosotros estamos cobrando sobre 32 céntimos, pero tenemos que estar todos unidos apoyándonos».
Asegura que «si no hay un precio base que cubra costes y nos permita vivir, seguiremos teniendo pérdidas durante años y estaremos abocados al cierre o a malvivir». Critica que «la administración no pone trabas a que las petroleras o las multinacionales de los cereales se pongan de acuerdo para subir los precios, pero a nosotros no nos lo permite».
Domingo Casanova, de Castro de Rei. Tiene una explotación de 280 vacas y 130 en ordeño. Explica que venden la leche a través de una cooperativa a 4 empresas y «el precio está sobre 27 céntimos, muy bajo para cubrir los costes de producción». Considera que «el precio mínimo debería ser de 33 céntimos el litro para cubrir los costes de producción y poder tener un salario».
Por último, lamenta que «los políticos no se enteran o no quieren enterarse de la situación crítica por la que estamos pasando los ganaderos».
«La diferencia de otras crisis del sector es que ahora hay miedo a que la industria no te recoja la leche»
Roberto, de Lugo. Explica que «tenemos una pequeña explotación familiar yo y mi mujer y la situación es crítica, no solo por el precio, sino también por el miedo a que la industria te deje de recoger la leche, que es lo que marca la diferencia de esta crisis respecto de otras que vivimos».
Además, recuerda que «subieron todos los costes de producción y los impuestos con respecto a años anteriores». En cuanto al precio, asegura que «somos socios de la cooperativa Agris y estamos cobrando a 27 céntimos y cayendo».
Por último, Roberto advierte de que “están engañando al consumidor porque la leche que viene de Francia y de otros países más barata que la nuestra no es leche sino que son lactosoros reconstituidos».
Las mobilizaciones del sector lácteo continuarán mañana en Ordes y el próximo día 27 en Sarria.