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La Consellería de Medio Rural acaba de convocar una línea de subvenciones que contempla, entre otras inversiones, la instalación de collares de monitorización del ganado, lo que se convierte en una nueva oportunidad para instalar Rumi, el sistema gallego de geolocalización que permite tener a los animales controlados en todo momento.
Las ayudas, por importe de más de 2.500 euros por ganadería, requieren hacer una inversión mínima de 5.000€. Para llegar a esta cantidad, las explotaciones pueden solicitarla de manera individual o bien en agrupación con otras 4 ganaderías, lo que además se valora en el baremo de puntos que se tiene en cuenta a la hora de la concesión.
El plazo de solicitud finaliza el día 31 de julio y la tramitación se realiza de manera telemática. Pueden beneficiarse de estas ayudas tanto explotaciones de leche en intensivo y extensivo como explotaciones de carne. Desde la empresa gallega Innogando, creadores de Rumi, facilitan la documentación necesaria para la tramitación de esta subvención, que permite ahorrar la mitad del coste de los collares.
Contacto
Para obtener más información sobre el sistema Rumi y la tramitación de las ayudas para comenzar a beneficiarse de sus ventajas en la explotación se puede llamar al número 644 586 245, contactar por whatsapp o también enviar un email a [email protected].
Los datos siempre a mano en todo momento
Los collares inteligentes Rumi funcionan a través de una aplicación para teléfono móvil muy fácil de usar, para que el ganadero pueda tener siempre las alertas en a mano sin necesidad de estar delante de un ordenador. No es necesario tampoco instalar una línea de internet en la granja, lo que supone también un ahorro.
Las alertas llegan al teléfono móvil del ganadero, lo que permite tenerlas siempre a mano, sin necesidad de estar delante de un ordenador
Rumi funciona tanto en interior, para ganado estabulado, como en exterior, incluso en lugares sin cobertura de telefonía móvil, habituales en muchas zonas rurales de Galicia, mediante la colocación de una antena en la propia granja con alcance de hasta 10 km y los collares llevan incorporada una pequeña placa solar que autorrecarga las baterías del dispositivo para que no sea necesario cambiarlas, lo que evita tener que coger el ganado que se encuentra fuera.
Rumi permite monitorizar el 100% de la granja y complementa la toma de datos del robot o la sala de ordeño
Precisamente esta es una de las ventajas de Rumi con respecto a otros sistemas existentes en el mercado, su versatilidad, ya que permite adaptarse a las condiciones de cada explotación, siendo además compatible con sistemas de ordeño robotizado, a los que complementa.
Detección de celos, la mejor manera de ahorrar dinero en una granja
Uno de los beneficios que aportan los collares Rumi es el control de celos. Al estar dotados de localización GPS y monitorización en tiempo real, ofrecen una solución para tener a las vacas y a la recría controladas en todo momento, lo que mejora la efectividad reproductiva de la granja.
Esto proporciona tranquilidad a los ganaderos y una mayor eficiencia productiva a través del control absoluto del rebaño, porque un celo detectado a tiempo supone una inseminación más viable y una vaca más rentable (menor número de dosis, menor intervalo entre partos y mayor número de lactaciones).
El collar inteligente permite un seguimiento completo e individualizado de los animales durante las 24 horas del día, tanto si están estabulados como si salen al prado
El dispositivo también emite alertas sobre el retraso en la inseminación, por ejemplo, si una novilla cumple 14 meses y no ha sido inseminada o si han transcurrido 60 días tras el parto de una vaca y no ha salido en celo, datos sobre los siguientes celos previstos u otros que ayudan al control reproductivo, como la lista de las vacas inseminadas hace 30 días para proceder a su revisión.
Control de la recría en otra nave
El seguimiento de las terneras y novillas es hoy un defecto importante en muchas explotaciones lecheras. A pesar de que el futuro de una explotación está en su recría, las ganaderías están tan centradas muchas veces en su día a día en el cuidado de las vacas en producción que se olvidan de la descendencia, que es realmente donde está el verdadero potencial de crecimiento y mejora de una ganadería.
En muchos casos, incluso si la granja tiene robot de ordeño o sala digitalizada que aporte datos de las vacas en producción, la recría sigue haciéndose a ciegas. Pero cuando se alcanza un volumen importante de animales esto supone un problema porque es imposible tener un control individualizado de cada animal.
Los collares inteligentes permiten un control individualizado en tiempo real de cada animal, incluso si las novillas están en otra nave lejos de la explotación o en la pradera
A esto se suma un factor añadido. El crecimiento de las ganaderías en los últimos años las ha llevado además en muchos casos a alquilar instalaciones para la recría que están incluso distantes varios kilómetros de la nave principal, lo que dificulta aún más su seguimiento, algo que ahora resuelve Rumi, enviando datos en tiempo real de cada uno de los animales al teléfono móvil del ganadero.
Al acortar la edad del primer parto son necesarias menos novillas para cubrir la tasa de reposición de la granja
Por eso, la solución que aporta Rumi supone un apoyo importante para las ganaderías de leche, ya que permite ahorrar tiempo y ganar en tranquilidad. El seguimiento continuo ayuda a optimizar la recría, adelantándose a enfermedades y detectando los celos, lo que permite adelantar con garantías a primera inseminación y la edad del primero parto y, por lo tanto, el momento en el que las explotaciones comienzan a recuperar la inversión realizada en la recría. Al estar produciendo antes, se ahorra en su alimentación y su retorno económico es mayor.
