Asentada en tierras de Camba y fundada en los años ochenta, O Rodo Sociedad Cooperativa Galega es una de las cooperativas líder en la producción de leche en la comarca pontevedresa del Deza. Acaban de cerrar un año en el que dieron forma a algunos de los proyectos más ambiciosos a los que se enfrentó la sociedad en los últimos tiempos: la construcción de unas nuevas instalaciones que incluyen una gasolinera, a punto ya de ser inauguradas. Su presidente, José Luis Camiñas, apuesta por trabajar en un proyecto comarcal que reúna a las cooperativas del Deza.
«Para ser una cooperativa pequeña en Galicia tuvimos un balance considerable en inversiones en estos últimos tres años con cerca de 2,2 millones de euros destinados, en parte, a las nuevas instalaciones», explica José Luis Camiñas, quien acaba de ser reelegido presidente junto al resto de la directiva, y que afronta otros tres años liderando el colectivo. La mitad de estos fondos proceden de ayudas oficiales. Buena parte de ellos fueron invertidos en estas nuevas instalaciones ubicadas en la entrada de la villa de Rodeiro. En una parcela de unos 10.000 metros cuadrados se levanta la gasolinera y una nave para el servicio de maquinaria, que hasta el momento permanecía en otra finca en pleno casco urbano, al lado de la tienda y oficinas del colectivo.
O Rodo lleva más de nueve años persiguiendo este proyecto que ahora ve la luz, con la nave casi terminada y la gasolinera pendiente solo de la autorización por parte de la Consellería de Industria. «La semana pasada tramitamos en el Ayuntamiento el fin de obra», concreta el presidente, que espera tenerla 100% operativa en breve, aunque no se atreve a concretar plazos al estar sujetos a tramitaciones de permisos. Precisamente, fueron las autorizaciones para los accesos a la gasolinera lo que más demoró este proyecto, además de suponer un encarecimiento.
Junto con estas instalaciones, las inversiones de estos últimos tres años estuvieron destinadas, en buena medida, a la reparación y renovación de maquinaria. «En O Rodo somos una cooperativa que apostamos por ofrecer servicios a los socios, por lo que hay que invertir constantemente en maquinaria. De lo contrario, en poco tiempo acabas teniendo solo chatarra y sin poder prestar servicios», recalca Camiñas. De hecho en el 2015, dedicaron a este fin unos 650.000 euros. Y es que en estos últimos años apreciaron también un incremento del 10% de los servicios que prestan.
O Rodo cierra estos tres años con un saldo positivo, que quedó evidenciado con un superávit de 170.000 euros en el 2017 , después de una facturación de 3,5 millones. «Nosotros nos centramos en los servicios, tanto de maquinaria, veterinario, tienda agraria, calidad de la leche, substituciones… Le ofrecemos cubrir el ciclo completo, desde siembra, recogida, el ensilado, el abonado… hasta la comida en la explotación».
Centrada en la producción en extensivo
O Rodo cuenta con 360 socios, no todos ellos activos. Casi el 90% de estos ganaderos son del ayuntamiento de Rodeiro y el resto repartidos entre municipios limítrofes: Dozón, Piñor, Chantada, Taboada, Antas de Ulla y Agolada. En la actualidad, integra 185 explotaciones de leche, buena parte de ellas en producción en extensivo; sin embargo el volumen de litros de leche producidos ya está casi igualado por parte de las explotaciones en intensivo. El año pasado alcanzaron una producción de 45 millones de litros de leche. El 70% se la venden a CapsaFood (Larsa), el 25% a Leche Celta y el 5% se reparte entre Leche Río y Hermanos López. En los últimos años experimentaron un incremento en esta producción alrededor del 4%. La cooperativa O Rodo la integran otras 43 ganaderías centradas en la producción de carne y el restante son socios no activos.
Con la vista en un proyecto cooperativo comarcal en el Deza
En una comarca ganadera como el Deza, los pasos de Clun o Aira, que permitieron la agrupación de cooperativas, están abriendo camino. «Yo pienso en un proyecto comarcal», anuncia Camiñas. Una propuesta que, por el momento, solo abordó con su junta directiva y no trasladó a los socios. Analiza que el volumen de explotaciones y producción de leche de la zona no se aleja mucho del de Aira. Además, recuerda que la cooperativa O Rodo ya se enfrentó al reto de la fusión, después de que en el 2005 absorbiese a Carboar. «Todos ganaron con aquella fusión», destaca.
«Pasar de siete u ocho cooperativas en el Deza a una sola es imposible, el camino es ir pasando por integraciones previas»
Para Camiñas las dificultades vienen, en gran medida, de la cantidad de cooperativas que persisten en Lalín, que reúne a seis organizaciones primarias: «no veo el sentido a que en alguna parroquia haya dos cooperativas.»-puntualiza el presidente de O Rodo.
«Pasar de siete u ocho cooperativas en el Deza a una sola es imposible, el camino es ir pasando por integraciones previas», subraya. «Nosotros aquí tenemos a Gandeiros do Deza, que es de Lalín, muy próxima, y esa fusión es de estudiar ya. Tenemos muchos servicios compartidos y sería un proceso de ahorro, donde ganaría el socio. Ahora incluso a mis socios si les propongo una fusión con Clun o Aira igual me pasa como a Xallas, un rotundo no. Incluso no le puedo proponer ni una comarcal directamente», sentencia Camiñas.
En diez años pueden cerrar 50 explotaciones por falta de relevo generacional
En O Rodo notan la falta de relevo generacional que afecta a buena parte de Galicia. «El sector lechero gallego aguanta lo que le echen antes de echar el cierre a la explotación, porque una vez que cierras, nunca más vuelves, no es cómo en otras empresas», reconoce Camiñas.
En la cooperativa O Rodo, que cuenta no solo con empresas familiares sino con grandes industrias que producen leche, Camiñas detecta que otro de los problemas a los que se enfrentan los ganaderos es que después de grandes inversiones, estas explotaciones rara vez son alquiladas, a diferencia de lo que ocurre con naves en los polígonos.
«En esta cooperativa aún tuvimos una reconversión considerable de gente joven que se incorporó a las ganaderías, tanto en intensivo como en extensivo», destaca. Sin embargo, calcula que en los próximos 10 años puedan echar el cierre otras 40 o 50 explotaciones por falta de relevo generacional.
«A Xuncoga le falta el compromiso del socio y crecer en fabricación»
Camiñas es directo a la hora de valorar a Xuncoga, la única cooperativa de segundo grado del Deza y en la que cuenta con más del 26% de participación desde el año 2000 . «A Xuncoga le falta el compromiso del socio de creer en ella, de quererla como quieren a O Rodo, de sentirla como suya. Además, a Xuncoga le falta crecer en fabricación de pienso, porque están produciendo un pienso de gran calidad a precios muy competitivos», defiende Camiñas.
Otro de los obstáculos para que esta cooperativa no acabe de afianzarse es la presión que hacen las integradoras. «Rodeiro no está centrado solo en vacuno de leche o carne y sé que muchos socios de O Rodo no compran el pienso en Xuncoga porque quien les integra ya quiere venderle el pienso. Ejercen esa presión.»-recalca Camiñas- «Las explotaciones que no tienen presiones compran el pienso en Xuncoga. Hay que pensar que Xuncoga es un hijo de O Rodo».
«Clesa es un germen en Galicia»
O Rodo participa, precisamente a través de la compra de acciones a Xuncoga en el 2014 (70.000 euros en 700 acciones), en el proyecto de Clesa, impulsado por otras nueve cooperativas bajo el nombre de Agrupación de Cooperativas Lácteas (Acolat) y que busca la venta de productos más allá de la leche fresca. «Nosotros tenemos una participación muy pequeña, pero hay que reconocerle el compromiso y la capacidad financiera que tuvieron en un principio Irmandiños, Melisanto y Feiraco. Clesa es un germen en Galicia, que ya terminó juntando a tres cooperativas considerables. Clun va a ser un referente. Clesa está cumpliendo los compromisos y su situación es buena».